¡Culpable!
El juicio del siglo concluyó y el veredicto fue ¡culpable!. Con ello uno de los narcotraficantes más famosos, influyentes y sanguinarios del mundo, el mexicano Joaquín “El Chapo” Guzmán, se asegura la cárcel perpetua. Nunca más saldrá de una prisión. Estará 23 de las 24 horas del día solo. Le espera el infierno, dicen analistas. Será el reo de los Estados Unidos más vigilado basado en su historial de dos fugas de cárceles de máxima seguridad en México. El barón de la droga fue encontrado culpable de los delitos de participación continua en una empresa criminal, conspiración internacional para producir y distribuir cocaína, heroína, metanfetaminas y marihuana; conspiración para importar cocaína, conspiración para distribuir cocaína, distribuición de cocaína a nivel internacional, uso de armas de fuego y conspiración para blanqueo de ganancias producto del narcotráfico. El juicio deja muchas lecciones para los sistemas judiciales de diversos países por donde transita la droga y manda un mensaje a quienes forman parte de las mafias internacionales del crimen organizado dedicas al tráfico de estupefacientes. Este juicio a México le deja un “mal sabor de boca”, pues no pudo juzgarlo por muchas razones, una de ellas y quizá la más importante es el alto nivel de corrupción y penetración de las estructuras criminales en las instancias judiciales de ese país. Los fiscales estadounidenses califcan la sentencia contra Guzmán Loera como histórica y trascendental, que deja un mensaje claro para quienes siguen operando y formando parte de esas estructuras en el mundo. “Este veredicto es una victoria para el pueblo estadounidense que ha sufrido tanto y por tanto tiempo, mientras Guzmán hizo miles de millones vertiendo veneno en nuestra frontera sur. Este veredicto es una victoria para los mexicanos que han perdido más de 100,000 vidas en la violencia relacionada con las drogas”, dijo Richard Donoghue, fiscal de la Corte del Distrito Este de Nueva York. Queda claro, sin embargo, que el narcotráfico no cesará con esta sentencia. Que este es un delito cuyos promotores se reinventan todos los días para mantenerlo activo, por lo que las autoridades, los gobiernos, deben mantener la lucha permanente en contra de esas estructuras y de sus líderes, aunque los expertos consideran que el narcotráfico no se detendrá mientras en el norte exista un gran mercado de consumo