Una nicaragüense que cayó rendida al amor de un catracho
Los primeros cuatro años de los 40 que llevan juntos han sido de los más difíciles en su relación.
Ella es nicaragüense y él hondureño. Además de su matrimonio les une su profesión, pues ambos son profesionales de la medicina.
Se trata del matrimonio de Eulogio y Meyling de Pineda. Él, de 69 años, la toma de su mano como si fuera aquella jovencita con la que pasaban horas conversando en la universidad, y ella, de 67 años, se ríe de cada chiste que escucha de su amado esposo. No pasó ni un año cuando la pareja de enamorados decidió hacerse novios y a los tres meses de iniciar su relación se casaron.
¿Por qué se enamoraron? Ambos son pediatras y cuando Eulogio admiraba la forma sencilla y humilde con la que su esposa trataba a los pacientes cayó rendidito a sus pies.
“Eso fue lo que más me atrajo, después me fui fijando que tenía bonitas piernas”, afirmó entre risas
“Si los dos venimos con hambre, si los dos trabajamos, no solo la mujer puede hacer las tortillas, todo se trata de colaboración. Igual si hay cosas que son pesadas, también las hago”. Meyling de Pineda
don Eulogio.
Los primeros cuatro años de casados, las discusiones eran constantes. “Yo alisté mis maletas tres veces y estaba que ya me iba, y siempre tenía lista la maleta por cualquier cosa... y al final no me fui”, expresó Meyling. Aún hoy hay una que otra discusión, pero confiesan estar más bendecidos que nunca