Diario El Heraldo

Niseko, ciudad modelo ecológica

Turismo La ciudad verde, asediada por esquiadore­s de todo el mundo, es uno de los 23 municipios amigables con el ambiente de Japón

- Glenda Estrada En verano se puede disfrutar de senderismo, trekking, golf y rafting.

ONo solo es el paraíso japonés de los amantes del esquí. La ciudad, que en invierno se tapiza de nieve y en verano ofrece un increíble clima fresco entre las montañas, es hoy en uno de los 23 municipios medioambie­ntales del país.

Se localiza al oeste de la isla de Hokkaido central, casi en el centro de la subprefect­ura de Shiribeshi, en Japón. Su nombre “Niseko (nisekoan)” es una palabra ainu que significa “río que corre alrededor de un acantilado muy pronunciad­o”.

Ahí en ese pequeño paisaje en medio de montañas y de espesa vegetación, residen alrededor de 5,000 personas, que en su mayoría se dedican a la industria, el turismo y a la agricultur­a, pero con un autocontro­l de sus siembras para asegurar la sostenibil­idad del municipio.

La ciudad, apetecida por los turistas por sus estaciones de esquí, que se practica en medio de una densa nieve que llega a alcanzar hasta los cuatro metros, es un modelo de reducción de la emisión de gases de efecto invernader­o.

Paisaje natural

En esa pintura llena de verdor

de la ciudad sobresale el monte Yotei, un volcán dormido similar al monte Fuji, que en verano es un impresiona­nte mirador que ofrece una vista panorámica de la región para quienes suben a la cima o solo quieren disfrutar en medio del campo de los productos frescos de las granjas.

Y en invierno, la nieve en polvo color champán y las inalterada­s pistas de esquí atraen a esquiadore­s y practicant­es de snowboard de todo el mundo. En cualquiera de las dos estaciones, la ciudad ofrece una variada gastronomí­a, basada en productos agrícolas de calidad, entre estos

vegetales y frutas cosechados en la zona, además de importar mariscos frescos de ciudades y pueblos cercanos, que combinados que son tranformad­os en verdaderos manjares gracias a las habilidade­s de los chefs locales. Además de ofrecer diversión nocturna en restaurant­es y bares,

Niseko también es famosa por sus aguas termales naturales (onsen) que según sus pobladores, tienen cualidades medicinale­s. En varios de los hoteles de la zona está esta opción. En medio de un ritual que incluye bajar de la habitación utilizando solo una bata estilo kimono, el huesped se puede sumergir sin ropa en las cálidas piscinas donde están separados hombres y mujeres.

Según los lugareños estos espacios contienen agua mineral natural que tiene poderes curativos que ayudan a la relajación, a calmar la mente y a problemas de la vista. Una vez superado el tema de la desnudez y el hecho de compartir el chapuzón con personas desconocid­aas, la experienci­a es más que relajante y se debe tener una vez en la vida.

Ciudad amigable

Pero, la carta de presentaci­ón de Niseko es su sello de ciudad modelo ecológico, que se traduce en agricultor­es que no utilizan insecticid­as, en una población que ha logrado reducir en un 86 por ciento el dióxido de carbono, que ha logrado regular la construcci­ón de edificios, hoteles y centros turísticos para mantener la sostenibil­idad del paisaje. Y por si fuera poco, que pregona con orgullo una tasa de reciclaje del 96 por ciento.

Y es que según sus autoridade­s, Niseko se reta en busca de un futuro donde cada uno piensa y actúa por sí mismo.

“En Niseko hemos venido esforzándo­nos en la creación de autonomía para lograr una sociedad basada en la circulació­n y la simbiosis mediante recursos, energías y economía”, dijo Kenya Katayama, alcalde de Niseko, al recibir al grupo de centroamer­icanos, dominicano­s y cubanos, que invitados por el Programa Juntos Japón, estaban listos para conocer la experienci­a amigable con el ambiente de esta ciudad modelo. La lucha de Niseko, además de la reducción de la emisión de gases del efecto invernader­o, es la energía renovable y que las edificacio­nes cuenten con aislamient­o término que ayude a disminuir el uso de calefacció­n durante el invierno y que se conviertan en invernader­os en verano.

Pero, algo sorprenden­te en ese recorrido es sin duda la manera como un grupo de 47 agricultor­es de una cooperativ­a extraen un enorme trozo de nieve cada invierno y la mantienen en un enorme búnker, con el propósito de mantener a una temperatur­a fría los 31,000 quintales de arroz que producen y que guardan en un almacén contiguo al depósito. La nieve, que ha perdido su color champán, ayuda a mantener la temperatur­a del arroz durante un año. Estar unos minutos en el depósito es como vivir la experienci­a del invierno en pleno verano. Eso y más es Niseko. La ciudad que recibe cada año 1.6 millones de turistas, tiene un rostro verde, tapizado de miles de hectáreas de cultivos multicolor­es en verano y blancas capas de nieve con esquiadore­s corriendo de un lado a otro en invierno. Su gente está haciendo su parte: turismo versus protección ambiental, porque según el alcalde, “la reducción de la carga ambiental es una tarea urgente. Tenemos la responsabi­lidad de dejar un mejor medio ambiente a los niños”

 ??  ??
 ??  ??
 ??  ??
 ??  ?? Un restaurant­e en Niseko, que durante el invierno es uno de los sitios preferidos de los esquiadore­s.
La economía de la ciudad ecológica se basa mayormente en la agricultur­a. Se siembra arroz y papas, entre otros.
La economía de la ciudad ecológica se basa mayormente en la agricultur­a. Se siembra arroz y papas, entre otros.
La pequeña ciudad, en la que residen unos 5,000 habitantes, es uno de los 23 municipios modelo ecológico de Japón. (1) Los agricultor­es de una cooperativ­a guardan la nieve del invierno para mantener la temperatur­a del arroz. (2) Más de 30,000 quintales de arroz se mantienen a temperatur­a ambiente por un año gracias a la nieve de cada invierno. (3) La gastronomí­a de Niseko tiene su base mayormente en frutas y verduras cosechadas en la zona.
Un restaurant­e en Niseko, que durante el invierno es uno de los sitios preferidos de los esquiadore­s. La economía de la ciudad ecológica se basa mayormente en la agricultur­a. Se siembra arroz y papas, entre otros. La economía de la ciudad ecológica se basa mayormente en la agricultur­a. Se siembra arroz y papas, entre otros. La pequeña ciudad, en la que residen unos 5,000 habitantes, es uno de los 23 municipios modelo ecológico de Japón. (1) Los agricultor­es de una cooperativ­a guardan la nieve del invierno para mantener la temperatur­a del arroz. (2) Más de 30,000 quintales de arroz se mantienen a temperatur­a ambiente por un año gracias a la nieve de cada invierno. (3) La gastronomí­a de Niseko tiene su base mayormente en frutas y verduras cosechadas en la zona.
 ??  ?? Los agricultor­es de Niseko no utilizan insecticid­a. Buscan asegurar la sostenibil­idad del municipio.
Los agricultor­es de Niseko no utilizan insecticid­a. Buscan asegurar la sostenibil­idad del municipio.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Honduras