Diario El Heraldo

Nosotros los morenos

- Mario Cálix M.

Aquí también se incluyó como obreros bananeros a negros de distinta descendenc­ia tribal, entre los apellidos de éstos se recuerda a los Guiti, Martínez, Cacho, Sacasa, Dolmo, Lino, Meléndez, Norales, Suazo, Herrera, Abaloi y a los Reyes. También sobresalen los de descendenc­ia jamaiquina que trajo la empresa bananera para el manejo de las máquinas del ferrocarri­l, maestros para la construcci­ón de puentes, mecánicos y para el control de las bombas suministra­doras de agua de los campos bananeros y del riego por aspersión de torres de mayor altura, que la que lograban alcanzar las matas de banano. Convivían en franca armonía, en sus interrelac­iones diarias con los ladinos-, se les decía como muestra de respeto “morenos” y, a las negras, con una expresión cariñosa “comitas”y los migrantes ladinos venidos de lejos y de otros países (Nicaragua y de El Salvador, en su mayoría), conviviend­o dos o tres familias en un mismo barracón. La mayoría fue despedida al eliminarse el transporte por ferrocarri­l, siendo sustituido­s el servicio por contenedor­es con tráileres manejados por choferes locales. Gran parte del resto fueron jubilados o despedidos al empacarse la fruta en caja por mujeres en las plantas de embalaje, unos pocos se quela daron y varios de los retirados se dedicaron a la agricultur­a y ganadería en sus comunidade­s, hoy sus descendien­tes se fueron para Estados Unidos, otros crían animales domésticos, ganado vacuno o pescan artesanalm­ente. mezcla de los negros mencionado­s en su desplazami­ento de Trujillo, a fines de la colonia, a este lugar dio origen a varias generacion­es, cuyos genes se mantuvo por largo tiempo, en su fisonomía, mentalidad, especialme­nte con gran arraigo en su pelo musuco, color y matiz diferente (más acentuado en unos y otros) y en el mismo modo de caminar dependiend­o de su origen.

De esa manera, a los nacidos en la segunda y tercera década del siglo pasado se podía distinguir de cuatro a cinco modos de caminar y de su forma de ser, inclusive a varias familias, se les podía distinguir claramente por ello. Así tenemos, a los que les distinguía el modo de caminar ladeado y arrastrand­o los pies como que les pesaran demasiado. A estos se les llamaba “garretío”, eran los descendien­tes aquellos que en su momento portaron los pies encadenado­s. Los de pecho ancho y canillas delgadas y cortas se les llamaba “negros canaletero­s”, descendien­tes de los que empujaban las canoas con sus canaletes, los “pitoretos”, eran trompudos y dados a soplar trompetas -caracoles-, en sí, instrument­os de viento. A otros se les denominaba “negros de argolla” -se distinguía­n por contar con un cuello largo y de nariz muy ancha y, los “bullanguer­os”, que tocaban y sacaban tonos musicales muy alegres de cualquier cosa: tabla, latas vacías, tambores y otros, casi siempre moviendo el cuerpo y los pies con gran ritmo. Por cada modo de ser de las caracterís­ticas anteriores, se mencionaba­n los nombres de los descendien­tes negroides que todavía vivían en los sesenta y setenta del siglo pasado

Los de pecho ancho y canillas delgadas y cortas se les llamaba ‘negros canaletero­s’, descendien­tes de los que empujaban las canoas con sus canaletes...”.

 ??  ?? Periodista Serie 3/3
Periodista Serie 3/3

Newspapers in Spanish

Newspapers from Honduras