EE UU autoriza nuevo test de Covid-19 para acelerar su detección
Muestras Estados Unidos está practicando varios tipos de pruebas que ayudan a una detección temprana del mortal virus
La agencia estadounidense de medicamentos (FDA) autorizó ayer un nuevo kit de recolección de muestras nasales para diagnósticos del coronavirus (Covid-19), aumentando la variedad de test disponibles con el fin de acelerar la detección de casos.
La FDA había aprobado antes, el 21 de abril, la primera prueba de una muestra doméstica autoextraída de la nariz y enviada a Lapcorp, una gran cadena de laboratorios. Luego, el 8 de mayo, la agencia aprobó un test de la Universidad de Rutgers, que utiliza una muestra de saliva tomada en la casa del paciente que se remite a un laboratorio. Ayer, la agencia autorizó un kit de nariz fabricado por la compañía Everlywell, que puede ser analizado con diferentes pruebas de detección. Una consiste en un hisopo y una solución salina en la que la muestra debe ser sumergida para luego enviarla con urgencia al laboratorio.
Dos test ya han recibido autorización para usar el kit Everlywell, y otros pueden ser aprobados más tarde, según la FDA.
En cada caso, la muestra se toma en el hogar, pero la prueba en sí se lleva a cabo en el laboratorio, que luego comunica el resultado. “La autorización de un kit de recolección hogareño para Covid-19 que se puede usar mediante múltiples pruebas en diferentes laboratorios aumenta la accesibilidad de los exámenes de detección para los pacientes y protege a otros del posible contagio”, dijo Jeffrey Shuren, director del centro de dispositivos médicos de la FDA. EE UU está realizando más de 300,000 pruebas diarias, según el Proyecto de Seguimiento Covid.
Tres billones para la pandemia
La Cámara Baja del Congreso de EE UU aprobó un paquete récord de tres billones de dólares para responder a la crisis del coronavirus y proporcionar pagos de emergencia a millones de hogares. La enorme propuesta demócrata proporcionaría casi un billón de dólares a gobiernos estatales y locales, otra ronda de pagos directos de 1,200 dólares a los habitantes del país y ayuda a los desempleados, los inquilinos y los propietarios de viviendas, a estudiantes endeudados con universidades y al Servicio Postal, que está sumido en una crisis. Los republicanos ridiculizaron el proyecto de ley, considerándolo una lista inflada de deseos de los demócratas que carece de futuro en el Senado controlado por los republicanos y que además enfrenta una amenaza de veto de la Casa Blanca