Frustran plan de fuga en Támara al descubrir túnel en los talleres
Ingobernabilidad En las operaciones de requisa también fueron decomisados fusiles AK-47 y granadas de fragmentación. Hasta ayer no había reos identificados por la elaboración del túnel y el ingreso de armas
Un plan de fuga de convictos fue frustrado por las autoridades del Instituto Nacional Penitenciario (INP) al descubrir la construcción de un túnel en la Penitenciaría Nacional de Támara.
El hallazgo de la ilegal obra, que apenas llevaba unos metros de profundidad, fue realizado en la zona de los talleres del recinto general, entre los módulos Procesados I y II y Sentenciados II.
El descubrimiento se dio tras varias horas de requisas efectuadas en varios módulos de la cárcel de Támara, en las que buscaban las armas de fuego usadas en un reciente ataque a varios de los torreones.
Ruidos en talleres
El túnel fue iniciado donde al parecer ya existía una plancha de concreto extraíble, propia de la misma edificación del penal, bajo las gradas del pabellón donde funcionan varios talleres. Al toparse con el conducto clandestino, encontraron a su alrededor una succionadora de agua, conectada a una extensión eléctrica, para sacar el agua que emanaba del agujero. Asimismo, una extensión que alimentaba un foco para poder alumbrarse.
Los responsables de la excavación aprovechaban el momento en que otros reos trabajaban en los talleres, ya que el ruido de las máquinas de carpintería y soldadura despistaban el sonido de la excavación y succión del agua que realizaban.
Un arsenal enterrado
Más temprano, enterrado en un promontorio de arena y desperdicios de construcción, autoridades de la Penitenciaría Nacional de Támara encontraron un arsenal de armas, entre fusiles y pistolas automáticas.
La minuciosa requisa se ejecutó desde horas tempranas del miércoles, derivada del fuerte tiroteo protagonizado por varios prisioneros, en un ataque a los torreones de vigilancia, el lunes 20 de julio recién pasado.
Para poder realizar la inspección, sin que los reclusos interfirieran en la misma, cientos de ellos fueron sacados a los patios para que los agentes penitenciarios y militares efectuaran las labores de búsqueda.
Primero revisaron el módulo Sentenciados II, donde hallaron 30 libras de marihuana, ocultas en una caleta. Posteriormente, en la zona del reclusorio conocida como “La Isla”, enterrados en el área verde de ese recinto encontraron dos fusiles AK-47 con sus cargadores vacíos y un lanza granadas de fabricación casera, elaborado con tubo de hierro. Dado este segundo hallazgo, la búsqueda continuó en Procesados II; ahí, junto a uno de los muros habían apilado restos de una reciente construcción y en medio de la arena estaban semienterrados cuatro fusiles AK-47, más un cargador extra del mismo calibre, cinco pistolas 9mm y dos granadas de fragmentación dentro de un balde.
Estas armas habrían sido las utilizadas para cometer el ataque en contra de los militares y custodios del INP, la mañana del lunes, en el que resultó herido un sargento que estaba en uno de los torreones. En la operación de requisa participaron agentes de Inspecciones Oculares de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI), quienes realizaron el levantamiento de los indicios, mismos que serán analizados en los laboratorios de balística para determinar si fueron utilizados en este u otros ilícitos.
Asimismo, hubo presencia de personeros de organismos de derechos humanos. Hasta ayer las autoridades del INP no habían identificado ni individualizado responsabilidad en ningún reo sobre la construcción del túnel, así como tampoco se sabe cómo ingresaron todas las armas de grueso calibre si esta cárcel cuenta con un sofisticado escáner