Mascotas: ¿sustitutos de los hijos?
CADA VEZ SON MÁS LAS PAREJAS Y LOS SOLTEROS QUE DECIDEN NO PROCREAR, PERO SÍ HACER CRECER LA FAMILIA
¿Y si en lugar de tener hijos, adopta una o varias mascotas? Para bien o para mal, esta alternativa está alcanzando cada vez mayor aceptación.
El aumento de los animales de compañía en los hogares podría ser inversamente proporcional a la disminución del número de descendientes. Estudios confirman que los millennials, es decir, los nacidos entre 1981 y 1999, que hoy tienen entre 21 y 39 años, son una generación poco dispuesta a procrear.
Al mismo tiempo, son cada vez más propensos a respetar los derechos de los animales, a los que reconocen como seres sintientes frente a los cuales los humanos tienen responsabilidades. Los animales, entonces, tienen derechos y necesitan protección, pero demandan menos tiempo, cuidados y recursos que un hijo, lo que los convierte en compañías ideales.
¿Trastorno?
Por otra parte, hay una creciente tendencia en los humanos a sentirse decepcionados de su especie y, por eso, muchos prefieren depositar sus afectos en seres de almas mucho más nobles.
Se sabe que tener una mascota es saludable porque su compañía genera beneficios tanto anímicos como físicos. Sin embargo, se puede caer en un apego excesivo a ellas, lo que acarrea consecuencias negativas y que podría ser considerado clínicamente como petofilia.
El problema viene cuando las personas comienzan a hacer que toda su vida gire en torno a sus amigos peludos, algo que ocurre muchas veces también cuando se tienen hijos. Pero ojo, que gastar mucho dinero en su perro o tratar a su gato como un humano no son necesariamente signos de este trastorno.
En resumen, si es de los que considera que prefiere optar por una mascota en lugar de hacerse de un hijo, la decisión es meramente suya, y, en dado caso, de usted y su pareja. Al fin y al cabo, ninguna familia es igual a otra, y todos tienen derecho de vivir su propio concepto de realización
En países como España el reemplazo de hijos por mascotas es aún más notorio.