Falta de sueño en los niños, ¿qué hacer?
LOS NIÑOS Y ADOLESCENTES DEBEN TENER UN BUEN EQUILIBRIO ENTRE SUS ACTIVIDADES Y EL DESCANSO
Si su hijo no duerme bien esto afectará no solo su estado de ánimo, sino también su rendimiento académico.
¿Su hijo duerme bien?, ¿tiene buenos hábitos de sueño?, ¿se despierta de buen humor?
Cuando del descanso se trata, es esencial crear una rutina que refuerce los buenos hábitos para lograr una correcta higiene del sueño.
Entre los cinco y los 12 años, los niños necesitan entre 10 y 11 horas de sueño diarias, una cantidad que va disminuyendo paulatinamente hasta que llegan a la adultez, cuando el promedio es entre siete y ocho horas cada día. Los adolescentes necesitan dormir alrededor de nueve horas cada noche. Respetar estos tiempos deriva en múltiples beneficios, pero mencionaremos dos que son sumamente importantes: mejora en el comportamiento y los procesos cognitivos.
La falta de sueño o dormir inadecuadamente tiene repercusiones negativas en la salud y en la vida académica. Los niños y adolescentes pueden empezar a tener problemas de comportamiento, cambios de humor, hiperactividad y problemas cognitivos que influyen en su capacidad de aprendizaje y derivan en el detrimento de su calidad de vida.
Múltiples investigaciones señalan que durante la noche hay procesos hormonales que no solo influyen en el crecimiento de los adolescentes, sino en su capacidad de aprendizaje.
¿Qué hacer para mejorar la calidad del sueño?
El televisor, el celular y la computadora deben quedarse fuera a la hora de dormir. Dejarle estos elementos a su hijo en su dormitorio significa que al cerrar la puerta ellos no van a dormir, sino a chatear con sus amigos, a ver televisión hasta muy tarde o hablar por teléfono, algo totalmente contraproducente para su salud.
Analice el mal genio, las bajas calificaciones y hasta la depresión de sus hijos, y haga los ajustes necesarios para que en su casa se practiquen buenos hábitos que serán de beneficio para toda la familia