HONDUREÑOS OLVIDADOS
CON LA FIGURA DE JUAN JOSÉ LABORIEL Y LADISLAO MOLINA LACAY, RECORDAMOS DOS ACONTECIMIENTOS IMPORTANTES EN HONDURAS
Abril conmemora dos fechas históricas: la herencia afrohondureña y la llegada del pueblo garinagu a Roatán.
La primera se remonta a la presencia de los primeros africanos en Guaymuras o Hibueras, traídos como esclavos por traficantes de “piezas de ébano” durante el período colonial (1502-1821), y su gradual mestizaje cultural y étnico con blancas e indígenas.
La segunda a partir de 1797, cuando 2,500 garífunas fueron exilados desde San Vicente, en el Caribe oriental, como represalia por haberse aliado con Francia en el conflicto global sostenido por ambas potencias en el siglo XVIII. Los ejércitos garífunas eran dirigidos por Satuye, quien cayó en combate en 1795.
Por ello, evocamos a dos compatriotas: Juan José Laboriel y Ladislao Molina Lacayo. El primero nació en Trujillo (1906). Muy joven se trasladó a México en búsqueda de oportunidades. Su talento como músico y actor fue perfeccionándose gradualmente, actuando en las siguientes películas: “Reina de reinas”, “La Virgen María” y “Barú, el hombre de la selva”. Con Francisca López procreó a Juan José Laboriel hijo (destacó como cantante de rock, conocido como Johnny), Ella, Abe y Esperanza. Falleció en la capital mexicana (1997).
El segundo nació en Santa Fe, Colón (1936). El Instituto Salesiano San Miguel le otorgó una beca de estudio a cambio de laborar como conserje. Se trasladó a la capital, hasta graduarse de bachiller. Otra beca hizo posible su traslado a la Perla de las Antillas, realizando estudios de Historia en la Universidad de Santiago de Cuba. Al retornar a su patria, laboró como docente en una escuela y posteriormente en el Centro Universitario Regional del Norte (CURN).
Fue padre de Tulio, Saskia, Tania y Albania Molina.
Sin olvidar sus raíces, defendió a la comunidad de Limón de los intentos por arrebatarle sus tierras ancestrales, denunciando en diario Tiempo tales despojos, lo que le provocó amenazas; también se interesó por educar a la juventud en el respeto debido a los adultos mayores. Falleció en San Pedro Sula en 2001