Renacer de iniciativas municipales

El municipio constituye la célula básica de la nación y el Estado en cualquier país. Es en él en donde se atienden aspectos básicos del desarrollo social, económico y educativo de sus pobladores. Afortunadamente, ese espíritu de emprendedurismo en que se ha actuado con iniciativa, diligencia e inteligencia continúa presente pese a intentos oficiales por debilitar su autonomía como parte del modelo autoritario centralista en que las órdenes proceden de la capital, sin tomar en cuenta las condiciones locales y el pensar y sentir de sus habitantes. En 1998, con ocasión de los masivos desastres causados por el huracán Mitch, varias corporaciones municipales buscaron auxilios dentro y fuera de Honduras para poder socorrer a sus compatriotas. Recordamos al alcalde de Morolica (destruida), que desde allí se desplazó, a pie, hasta Tegucigalpa. Igualmente, los munícipes de Santos Guardiola, desplazándose hasta Estados Unidos con similar propósito. A partir del 2020 al presente, con los devastadores efectos de la pandemia, la corrupción, el paso consecutivo de dos fenómenos meteorológicos, la incapacidad gubernamental para dotar de refugio a los damnificados y vacunar masivamente a los gobernados, por iniciativa propia, distintos alcaldes de diversa filiación política optaron por comunicarse con el mandatario salvadoreño en solicitud de vacunas. Su respuesta fue y continúa siendo positiva, donándolas, sin tratar de aprovecharse de la calamidad. La consolidación de las ZEDE en directo perjuicio a la soberanía patria ha generado un sentido de alerta a nivel nacional, regional, departamental, municipal, al comprender que se encuentra en peligro inminente nuestra existencia misma de república libre, soberana e independiente, La decisión más reciente la ofrece la corporación municipal ceibeña, al declarar la ciudad puerto y su jurisdicción libre de ZEDE. La historia registra quiénes están actuando a favor de los sacros intereses colectivos y quienes buscan, meramente, lucros adicionales a los que ya poseen, además de refugio y santuario una vez dejen el poder