COMER CONSCIENTE
SON RECOMENDACIONES FÁCILES DE LLEVAR A LA PRÁCTICA Y QUE TRANSFORMAN LA CALIDAD ALIMENTICIA DEL NÚCLEO FAMILIAR. DE PORCIONES A HORAS, AQUÍ UNA COMPILACIÓN BÁSICA
Es un hecho indiscutible: la nutrición juega un rol imprescindible en el bienestar integral de una familia.
Sin embargo, pese a manejar con detalle todas las consignas nutricionales, fomentar los pilares de una dieta balanceada en cada miembro del hogar no es nada fácil, especialmente cuando las exigencias del día a día minan todo esfuerzo.
Pero no se desanime; realizar cambios pequeños y simples en su rutina puede tener un impacto colectivo positivo. Según especialistas, acciones simples como reservar tiempo en la agenda para las comidas familiares pueden ayudar a que los menores consuman alimentos más nutritivos.
Otro ajuste viable es mantener las verduras lavadas y al alcance visual de todos. Podría, por ejemplo, colocar verduras como pepinos, tomates y zanahorias en los primeros estantes del refrigerador. Esto será un atractivo por defecto.
Las manzanas, peras, naranjas o cualquier fruta de temporada también deben ser colocadas en puntos focales.
Dé el ejemplo. Un niño que vea a sus padres preparar alimentos de forma saludable adoptará sus costumbres.
Y para un impulso adicional, mueva las chucherías o conservas fuera de la línea de visión o guárdelas en la parte posterior de los estantes.
Ahora, en lugar de sal, utilice el zumo de limón o naranjas agrias, pimienta y una mezcla de hierbas y especias; esto aporta un toque excepcional de sabor.
Una recomendación más básica es no servir la cena después de las 8:00 de la noche, debido a que hacerlo puede influir en su peso.
En cuanto a las porciones en el plato, debe haber, al menos, un 50% de verduras y hortali
CLAVE
SALUD FAMILIAR
la familia en la Incluya a toda preparación de planificación y a no solo ayuda comidas. Esto sino que responsabilidades, distribuir una relación más también fomenta comida. positiva con la
Preste atención a lo que come. Evite comer frente a la televisión o la computa- dora. Disfrute de cada bocado y coma lentamente para per- mitir que su cuerpo registre la saciedad.
zas completas, junto con proteínas y grasas saludables.
Y, finalmente, no asuma que sus hijos no comerán “comida de adulto”.
Mantenga opciones de meriendas saludables, como frutas, verduras cortadas, yogur natural o frutos secos, al alcance para evitar recurrir a opciones menos saludables.
Haga uso de su ingenio y aléjelos de los clásicos menús infantiles. Usted les dará la pauta de su estilo de vida.
Antes de comprar cualquier producto con preservantes, lea la información nutricional. Esta data puede ayudarlo a seleccionar alimentos que se ajusten a las necesidades de su familia.
En la medida de lo posible, hornee, ase o cocine a la parrilla sus platillos. Por otro lado, evite cocinar con manteca o aceite vegetal en exceso.
Use versiones más saludables. Elija aquellos que le ¿COMIDAS FUERA DE CASA?
proporcionen energía.
Opte por frutos secos o frutas. Además, si busca vitaminarse, pregunte a su médico por suplementos. Coma más cereales integrales como la avena, arroz integral, centeno y pasta integral. También beba mucho líquido.
Elija agua, leche baja en grasa y bebidas bajas en calorías. Coma más verduras y frutas frescas. Trate de consumir un total de 2 tazas de fruta y 2½ tazas de verduras cada día
nutrientes
y