EQUILIBRADO DE LLANTAS: ¿CUÁNDO Y POR QUÉ?
Sin importar si la llanta es nueva o usada, está sujeta a imperfecciones, y para equilibrar su peso debe, regularmente, llevarlas a balancear
Todo gira y gira. Esa es una perfecta analogía para la ingeniería que hace posible el despla- zamiento de su automóvil por las calles y carreteras. Es por ello que las llantas deben mantenerse en perfecto estado y equilibrio, después de todo, son el único punto de contacto entre el carro y el suelo. Cuando surge un desequilibrio en el giro de una rueda, se vuelven perceptibles vibraciones incómodas y la calidad de conducción se deteriora. Toda llanta necesita balance, pues ninguna, ni siquiera nueva, es perfecta. ¿Cómo y con qué frecuencia debe llevar su carro a balancear las llantas? A continuación, le detallamos las respuestas a estas y otras preguntas relacionadas.
Alineamiento y balanceo
El conjunto rim y llanta puede tener diferentes concentraciones de peso en cada sección o área de la circunferencia (sin importar si el automóvil es nuevo o no) y por ello se necesitan pequeños contrapesos metálicos de unos cuantos gramos, usualmente de plomo por ser suficientemente masivos, para que estratégicamente se aseguren en los bordes de cada rim y permitan un rodaje lo más perfecto posible. Su constitución misma y el desgaste debido al uso normal suele hacer que las llantas pierdan su balance eventualmente. Con un desequilibrio de apenas 6 gramos, usted sentirá los síntomas que aquejan a una llanta desbalanceada.
Si bien el balanceo de llantas debe efectuarse de forma correctiva (es decir, cuando los síntomas del mal funcionamiento son evidentes), lo más
CLAVE
Si algún rim de su vehículo ha sufrido alguna deformación por golpe o accidente, repare primero ese daño antes de balancear la llanta, pues resultará fútil intentar balancear el conjunto sin subsanar el daño en el rim.
recomendable es realizar mantenimiento preventivo y programar una rotación de posición de llantas y balanceo cada 8,000 km o cada cambio de aceite. Como parámetro mínimo, se recomienda realizarlo una vez al año si usa su vehículo esporádicamente. Empero lo anterior, es imperativo balancear una llanta cada vez que esta ha sido reparada por haber sufrido una pinchadura o balancear las cuatro simultáneamente con cada alineamiento.
Si una llanta está deformada o un rim está dañado estructuralmente debido a algún golpe o accidente, le será imposible balancear correctamente el conjunto y su seguridad estará en riesgo. Haga las reparaciones pertinentes primero y finalice con el preciso balanceo