MASACRE: NI A BEBÉ DE 13 MESES PERDONARON ENCAPUCHADOS
La Policía dice que están identificados los autores de las siete muertes
TEGUCIGALPA. El dolor, el llanto y la consternación se apoderaron de todas las personas que viven en el sector 8 de la colonia Villa Nueva, de la capital. Ayer, una gran cantidad de personas se reunieron en una humilde casa para darle el último adiós a cuatro miembros de una misma familia, asesinados en la masacre del sábado en horas de la noche. Los cuerpos que estaban ve- lando son el de Luz Marina García (de18 años), Marvin Yovani García (de 32), quienes eran pareja, y su bebé Isaac ( dr 13 meses). En el mismo cuarto velaron a María Matilde Ortiz (de 42), era tía del pequeño Isaac y deja una niña de 12 años. Marvin era albañil, su esposa Luz lavaba y planchaba ajeno para colaborar con los gastos del hogar. El niño era la mayor felicidad de la pareja, ya que la primera hija murió al nacer hace dos años. Doña Victoria Mairena, abuela del bebé, se mostra- ba serena a pesar del dolor que sentía al haber perdido a su familia. “Mataron a mi familia, los perdí, que Dios los perdone”, aseguró adolorida doña Victoria.
De compras. El sábado en la noche, la pareja venía de comprar la provisión de la semana, iban a recoger a su hijo que estaba en casa de unos familiares. Seis sujetos irrumpieron la tranquilidad de la noche y comenzaron a disparar contra siete personas que perecieron, entre ellas la pareja y el bebé que se encontraba en el interior de la vivienda que fue alcanzado por las balas. La madre de Luz Marina al verla dentro del féretro se desmayó del impacto. En otras dos casas cerca de la familia que era velada también yacían los cuerpos de las otras víctimas que perdieron la vida en la masacre. A pocos metros estaban velando a César Sebastián Flores (de 26), un ayudante de albañil que decidió ir a jugar cartas con unos amigos, lo que le causó la muerte. Michelle Pavón, esposa de la víctima, estaba retirada del ataúd, no soportaba ver a su marido sin vida. Ella tiene una niña de seis años y está embarazada del hoy occiso, ahora tendrá que luchar sola para sacar adelante a sus hijas. A una distancia mayor estaba el velatorio de Catalino Vásquez (de 27), otra víctima mortal. El joven era jardinero de la Secretaría de Infraestructura y Servicios Públicos ( Insep). En el interior de la vivienda estaba su madre Dominga Vásquez, también su esposa que estaba muy afectada con el asesinato de su esposo mientras sostenía en brazos a su único
hijo de un año. Óscar Izaguirre, la séptima víctima, fue velado en una funeraria cerca del HEU.
Identificados. La Policía ya tiene identificados a los criminales que participaron en la masacre que dejó siete muertos en el sector 8 de la colonia Villanueva. El atentado criminal fue perpetrado por personas muy bien armadas que se transportaban en un pick up Mitsubishi, doble cabina, el que tres horas más tarde fue encontrado abandonado en el sector de La Guasalona, en el sur de la capital. Los delincuentes se bajaron del carro y empezaron a disparar contra las personas que estaban sentadas en una esquina. Una de las víctimas por querer salvar su vida se refugió dentro de una vivienda y fue perseguido por uno de los delincuentes que le disparó en reiteradas ocasiones. En esa habitación estaba dormido un bebé de apenas 13 meses al que también le infirió tres balazos en la espalda que le quitaron la vida. El subcomisionado Raúl Martínez Alvarado, jefe de la Unidad Metropolitana Policial (Umep 4) de la colonia Kennedy, dijo que ya se ha avanzado en las investigaciones del caso. “Se están haciendo algunos cruces de información y se tiene identificada a una de las estructuras que participó en este hecho, por lo que en estos días se van a hacer algunas capturas”, dijo. El carro en el que se transportaban los criminales tenía reporte de robo desde hace dos días. Una de las primeras hipótesis es el enfrentamiento entre estructuras porque están en conflicto y puede ser por disputa de territorio”, explicó Martínez.
"ya se ha avanzado en las investigaciones del caso"