Casi la guerra
MéxicoyVenezuelasondospaíses alosquequieromucho, perome dueleenormementeverloque estánviviendo; escasilaguerra. Méxicoesunpaísmaravilloso, amoroso-esmuydifícilsentirse soloahí-, solidario, llenodecoloresy dehumor, muyprivilegiadocultural ygeográficamente. Oye, yquéricose come, perohaytantosmuertosque elInstituteforStrategicStudieslo declaróelsegundopaísmáspeligrosodelmundo. Lascuentassonmortales. Con EnriquePeñaNietoyapasamoslos 79milmuertosenmenosdecinco años. Esdifícilencontraraunafamiliamexicanaquenohayasufrido recientementeuncrimenencarne propia. Bastapreguntarsinmucho afánparaescucharunanecdotario delhorrorydelsadismo. Delos últimosdíassemehanquedado grabadasdosimágenes: una, ladel sombreroensangrentadodelperiodistaJavierValdez, asesinadoen Culiacán, Sinaloa, ylaotra, ladeun soldadomexicanomatandoconun disparoenlacabezaauncivilcaído enunacalledePalmarito, Puebla. Lasdosimágenessonigualmente brutales. Peroelproblemaesquelosmexicanosnoshemosacostumbrado alobrutal. Lamuerterondatan frecuentementequesehahecho compañera. Loqueantesindignaba –ladesapariciónde43estudiantes deAyotzinapaolasmasacresde TlatlayayNochixtlán- deprontoes partedeunalargalistadecrímenes impunes. HaytantosAyotzinapas pasandoenMéxicocadames– jóvenesquedesaparecendelmapa sinningunapista- quenoshemos vueltoinsensiblesalatragediade madresypadresbuscandodesesperadamenteasushijos. MientrasMéxicoestámarcado porlacasiinevitablerutinadela muerte, comoenuncuentodeJuan Rulfo, enVenezuelalascallessiguen llenasdeesperanzadecambio… y degaseslacrimógenosdelaGuardia NacionalBolivariana. Venezuelaes tanhermosaqueCristobalColón, ensutercerviaje, creyóquese acercabaalparaísoterrenal. Esees elmismoterritorioquehoysedesmorona. DesdequeNicolásMaduro sequitólamáscaradedemócratay ordenóladisolucióndelaAsambleaNacional, lascallesdeCaracas ydelasprincipalesciudadesde Venezuelasehanconvertidoenun campodebatalla, literalmente. Laestrategiaesclara: laoposición tomalascalleshastaquecaiga Madurooacepteunplandesalida; elGobiernoreprimehastaquelos opositoresnoaguantenmás. El prisioneropolíticoLeopoldoLópez tienecomogritodeguerralafrase: “Elquesecansapierde”. Laoposi- ciónhatomadoesegritocomoun rezoynohancedidolascalles, pero elcostoesaltísimo: másdecuarenta muertos, ensumayoríajóvenesque deberíanestarestudiando, viajando, bailandoydescubriendolavida, nolamuerte. DosimágenesdeVenezuelamequitanelsueño. Unaesladeunguardia quedisparaaquemarropauntubo degaslacrimógenoalpechodeuno delosmanifestantes. Elchicose levantaaturdido, heridodemuerte ydaunospasosantesdecaer. Otra esladeMadurobailandoenun televisormientraslacámarapanea paraverlarepresiónoficialenla calle, comoNerónenelincendiode Roma. Trascasi18añosdeGobiernosautoritariosy, ahora, deunaclaradictadura, losvenezolanosnoaguantan más. Enparteeslahambrunay lafaltademedicinashastaenlos hospitales. Enparteesquehan salidocasitodoslosquesepudieron irylosquesequedaronnotienen adóndeirmásquehaciadelante. Tantasveceshemoscreído, equivocadamente, queVenezuelavaa cambiarquenoquieroilusionarme demasiado, perocuandoviqueun grupodejóveneshacíanretroceder aunatanquetapensé: Yaperdieron elmiedoenVenezuela, seacabó Maduro. No, VenezuelayMéxicono estánenguerra, perocasi.
mientrasméxico marcalarutade lamuerte, en venezuelalas callessellenan deesperanza