ENFOQUE Universitarios construyen escuelas en el Valle de Sula Fundación Estudiantes Ayudando a Honduras (SHH) edifican aulas para talleres técnicos del instituto Esteban Moya de El Progreso Ya son 42 las construcciones en diferentes zonas
EL PROGRESEÑO
EL PROGRESO. Los alumnos del instituto oficial Esteban Moya de esta ciudad se suman al beneficio que desde hace varios años viene brindando lafundaciónEstudiantesAyudando a Honduras (SHH) con la construcción de aulas. La falta de espacio en ese centro educativo es uno de los problemas que afecta en granmaneraalosjóvenesatal grado que los maestros se han visto obligados a edificar galeras para atender la demanda, en especial el área técnica. La necesidad llegó a oídos el fundador de esa organizaciones internacional, Shin Fujiyama, quien coordinó la llega de los universitarios de EUA y otros países amigos para iniciar la obra. Pero ese tipo de problemas no solo se ve en el Esteban Moya, otros centros educativos han requerido al apoyo de los extranjeros para ampliar sus instalaciones. Tal como ocurre en la colonia Alexander López de El Progreso y Finca 11; de igual manera en los municipios de San Rita, Villanueva, Potrerillos y otros de la zona del Valle de Sula.
Ejemplar. El director del colegio beneficiado, Bernan Zelaya, informó que el costo de la edificación se aproxima al medio millón de lempiras. “Estamos muy agradecidos con el aporte, ahora los estudiantes de las carreras técnicas tendrán un local digno para un mejor aprendizaje, durante los últimos meses se han impartido las clase en galeras improvisadas”. El mentor explicó que el beneficio es para más de 300 muchachos que estudian en el establecimiento. Los trabajos en ese lugar comenzaron hace tres semanas, se espera que el módulo de tres aulas esté terminado a más tardar en septiembre. Shin Fujiyama expresó que la meta es construir 1,000 escuelas, “con las que en estos momentos estamos edificando ya sumamos 42, cada año construimos entre diez y 15”. El voluntario japonés dijo que eso no se podría lograr sin el apoyo de las autoridades municipales y comunidades, estos ayudan con maquinaria y mano de obra no calificada. “Los más bonito de esto es que el beneficio va dirigido a niños y jóvenes de escasos recursos económicos que por mucho tiempo junto a los maestros han venido lu- chando para mejorar las instalaciones de sus centros de enseñanza”, dijo. Fujiyama agregó que el grupo de universitarios que llegaron hace unas semanas proceden de la ciudad de Nueva Jersey, E s t a d o s Un i - dos. El alcalde Alexander López dijo que gracias a la solidaridad de la SHH han logrado mejorar las condiciones de aprendizaje a centenares de escolares y colegiantes en todo el municipio. “Estamos unidos en esas labores, la idea es que la ayuda se siga extendiendo en todo El Progreso”. Mirna Carranza, una de las madres, manifestó que eso es una bendición de Dios.
Las municipalidades apoyan con maquinaria y parte del material. Pobladores y los universitarios ponen la mano de obra.