Hijos bonsai
Una de las múltiples aportaciones que la cultura japonesa ha hecho a la humanidades el arte del bo ns ai. Árbolesque, denohabersido sometido sauna cuidados apoda deramasyraíces, habríanllegadoa ser enormes y frondosos, gracias a ello caben en un pequeño macetero y llegan a crecer apenas algunos centímetros. Evidentemente esosárboles, cuyotroncoyramas pudieron ser maderables y de los que se pudieron fabricar muebles yartesonados, alpermanecer enanos solo sirven para deleitar la vista, no tienen otra función que la de ornamentar salones y estancias. Cuando los padres impedimos el desarrollo natural de los hijos sucede igual. Hombres y mujeres que pudieron llegara tener personalidades recias; hombres y mujeres que habrían podido realizar aportes notable sala sociedad, se quedan encogidos, carecen de la fortaleza indispensable para a cometer grandes empresas y se con forman con una vida mediocre, si es que no optan por para si tarde los demás y para no servir más que deadorno, comolosbonsai. Hay básicamente tres actitud es paternas que producen personalidades bo ns ai.Laprim era: la sobreprotección. Cuando sustituimos a los hijos en el esfuerzo, cuando les impedimos que resuelvan sus propios problemas, cuando peleamos sus batallas y evitamos que padezcan sus propios dolores, estamos impidiéndoles crecer. Cuando les hacemoslacama, aunqueellos puedan; cuando les lustramos los zapatos, y nos convertimos en sus esclavos; cuando les preparamos comida ala carta y satisfacemos sus caprichos, estamos convirtiéndoles en objetos de vitrina, en bonitos pero inútiles bo ns a is. Otra manera de castrara los hijos es cuando hacemos de papás aplanadora, cuando actuamos como sepultureros. El autoritarismo es una de las peores versiones de lapa- ternidad/maternidad. Ademásde destruirla autoestima de los hijos, los padres autoritarios pretenden imponer modo de ser, carrera profesional, y hasta cónyuge. He dicho que actúan como sepultureros porque solo les falta colocar una lápida sobrehijosehijas, productodelas humillaciones, elmaltratoverbal einclusofísico. Luegoenlugarde hombres críanhomúncul os. Finalmente, también son fabricantes debo ns a is los indiferentes, losque“pasan” deloshijos, losque rara vez sea cercana la escuela o al colegio, los que nunca están cuando mássenecesitan, losqueproveen todo lo material pero enlode más son como invisibles, los que nunca van a verlos cuando sale nene lacto cívico o juegan al fútbol, aquellos cuyoshijosson, comodijerasan JuanPabloII, huérfanos de padres vivos. Lapaternidad/maternidad noseimprovisa. Hayqueponerle cabeza o terminamos por“pasearnos” en los hijos.
“LAPATERNIDADY MATERNIDADNOSE IMPROVISAN, HAY QUEPONERLECABEZA ONOS‘PASEAMOS’ ENLOSHIJOS”