Sistemas de información accesibles

Con el Estado de Honduras cubriéndose las espaldas con la Ley de Secretos de Estado es difícil hacer sentir ala ciudadanía que existe voluntad estatal para transparentar los asuntos públicos y, más aún, darle acceso ala ciudadanía a conocer el accionar y los documentos estatales de incumbencia pública. Si a esto le agregamos que el Instituto de Acceso ala Información Pública se ha convertido en una institución poco eficaz y enormemente política, estamos ante un fracaso más de la sociedad civil para poder orquestar una estrategia de transparencia para los asuntos del Estado. Parece que alIAIP aún no llegan magistrado s con suficiente capacidad técnica, legal y con suficiente independencia política como para hacer de esa institución un arma poderosa de la ciudadanía para aclarar todo lo oscuro que sucede en el ámbito gubernamental. Sigue representando los intereses de cada partido que le ha dado el patrocinio a sus magistrados. Creíamos que estábamos ante un cambio de mentalidad de los funcionarios públicos mediante los mecanismos de transparencia, pero es probable que solo fue parte de una moda momentánea del que hacer civil organizado. Pasada la moda, olvidado el proyecto. Sin duda, el acceso que la ciudadanía pueda tener alas herramientas como el internet harían que la fuerza examinadora del público sobre los asuntos de Estado tuviera éxito, pero en vez de que las instituciones trabajen más en brindar por tales de información pública, todo se está cubriendo con una opacidad que hace mucho daño ala transparencia y la publicidad que merecen los asuntos públicos. Si los mismos mecanismos de acceso no son amigables con el público, cuánto menos lo serán las propias instituciones, que cada vez cierran sus puerta sal escrutinio público. La fluidez con la que seda la información también es importante, ya que esa información no fluye con la rapidez conque desea el público, desde los por tales que no se actualizan hasta lastrabas que le ponen ala ciudadanía parada runa copia de una documento específico o una copia completa de un expediente. Así que son más las barreras que impiden los accesos que los mecanismo s que pueden facilitar el acceso público ala información. La cultura de la rendición de cuentas está cayendo en picada, cuando es también una estrategia que camina junto con la información pública, perosiel mismo Estado guarda secretos sin razón, las instituciones sienten que pueden esconderse del público. Si el Estado desea promover la rendición de cuentas, el mismo Estado debe promover los mecanismos necesarios, fáciles y accesibles para que el público se entere de la acción gubernamental, quitando las barreras técnicas y legales y proveyendo cada vez más acceso al público a través del internet. Los enlaces de información en las instituciones deberían ser personas técnicas, dependiente sdelIAIP y no de las mismas instituciones, pues nos encontramos con enlaces de información que lo único que les interesa es justificar su salario, defendiendo ala institución para la quetrabajan. En cuestiones presupuestarias, por ejemplo, no existe una difusión pública de los presupuestos económicos conque funciona cada dependencia estatal que le permita a los ciudadanos pedir información acerca de esos presupuestos, pero también preguntar acertada mente acerca de su ejecución y los mecanismos de control que se ejecutan sobre los mismos presupuestos y proyectos estatales. Si fue la sociedad civil la que dio inicio a esta era del acceso ala información pública, es entonces la obligada a replantearse una estrategia funcional y objetiva para que el tema no quede solamente en una moda pasajera, sino en un auténtico logro de la sociedad civil ante la opacidad estatal acostumbrada.

“Hayqueeliminar barreras Técnicasy legalespara promovercon efecTiviDaDla renDiciónDe cuenTas”