Preparativos para el desorden
Lo que estamos viendo en la Unah es el entrenamiento de individuos que carentes de responsabilidad cívica acatan las órdenes de sectores políticos que intentan el fracaso del proceso electoral. Algo parecido aconteció en el año 1932 cuando un grupo de liberales, para impedir el triunfo del Dr. Y Gral. Tiburcio Carías Andino dispusieron alzarse en armas para derrocar al Dr. Vicente Mejía Colindres presidente liberal en funciones. Aquel desorden fue denominado “la revuelta de las traiciones” y estaba encabezado por el Gral. José María Reina, el abogado Antonio Reina (padre de Carlos Roberto y Jorge Arturo) Dolores Reina de Watson, y otros liberales disidentes, cuyo fin supremo era impedir la celebración de elecciones en octubre de ese año. El presidente Mejía Colindres, ante el asedio de traidores de su partido (liberal) solicitó ayuda a don Tiburcio Carías, aceptando este darle apoyo a fin de pacificar el país. En una rara combinación de fuerzas militares integradas por liberales leales y elementos cariistas los sediciosos fueron derrotados y el pueblo concurrió a las urnas. Han transcurrido ochenta y cinco años y tal parece, a estas alturas, que hay individuos de mentalidad retrógrada y cavernaria que pretenden repetir de alguna manera aquellos funestos sucesos del siglo pasado. Los hondureños buenos aspiramos a vivir en paz, lograr el desarrollo de la nación y mejor nivel de vida. Que se imponga la sensatez y el amor a la patria este 26 de noviembre.
JOSÉ ANTONIO BAIDE M.