Ciudades “santuario” asestan otro revés legal al Gobierno de Trump
Un juez de San Francisco bloquea de forma permanente la ley promulgada por el presidente estadounidense, que pretendía dejar sin fondos a las ciudades que defienden a los inmigrantes
WASHINGTON. Un juez federal estadounidense bloqueó de forma permanente la orden proclamada por el presidente Donald Trump, para negar fondos a las llamadas “ciudades santuario”, aquellas que se niegan a colaborar con las autoridades migratorias para deportar a indocumentados. Elmagistrado, William-Orrick, con tribunal en San Francisco, California, había bloqueado temporalmente la orden en abril, y ahora lo hizo permanentemente argumentando que es inconstitucional. Orrick, que se pronunció ante las demandas presentadas por el condado de Santa Clara y la ciudad de San Francisco, dijo que Trump no puede imponer nuevas condiciones a unos fondos previamente aprobados por el Congreso de EUA. En un comunicado, el Departamento de Justicia de EUA expresó que Orrick “se excedió en su autoridad” al bloquear la orden de Trump. El Departamento de Justicia, de hecho, ya apeló la decisión de abril de Orrick ante el Tribunal de Apelaciones del Noveno Circuito, que también tiene su sede en San Francisco y es la instancia inmediatamente inferior al Tribunal Supremo.
Júbilo. Las ciudades “santuario” celebraron ayer el nuevo triunfo que evita que el Gobierno de Trump les limite fondos federales por no co- operar con Inmigración y prometen mantener sus valores y resistir el “acoso ilegal” del presidente contra los indocumentados. Seth Stein, vocero del alcalde de Nueva York, Bill De Blasio, dijo que la decisión del juez federal William Orrick, de bloquear de forma permanente la orden ejecutiva del presidente Trump de negar fondos a las llamadas “ciudades santuario”, reafirma que las ciudades estaban en lo cierto. “(El juez) ha reafirmado lo que siempre supimos: el intento del Gobierno de Trump de cortar las subven- ciones es anticonstitucional y coercitivo”, aseguró. El alcalde de Chicago, Rahm Emanuel, declaró ayer que las ciudades, condados y estados que rechazan colaborar con el Gobierno en su lucha contra la inmigración ilegal no se van a dejar “intimidar” ni “comprar” por el Gobierno para cambiar sus “valores”. En la Casa Blanca, un comunicado de la oficina de prensa señaló ayer que el estado de derecho recibió otro golpe, cuando “un juez reescribió unilateralmente” la política de inmigración de la nación.