Isabel: desventajas de ser reina
LA CONFESIÓN LA MONARCA INGLESA HABLA DE LA CORONA Y LO DIFÍCIL QUE FUE LA ENTRONIZACIÓN COMO SOBERANA
REDACCIÓN. Poco a poco la reina Isabel II de Inglaterra va mostrando su lado más humano, alejándose de los convencionalismos y el riguroso protocolo real. Ahora ha sorprendido con unas revelaciones que nadie esperaba. En una entrevista poco usual ofrecida por la soberana para el documental The Coronation en el canal del Smithsonian, su majestad habló de las “desventajas” de la corona para el periodista y experto en realeza Alastair Bruce. La monarca de 91 años admitió que la joya que un día la recibió para distinguirse como la reina luce un poco diferente hoy que cuando la usó por primera vez su padre “y no puedes mirar hacia abajo para leer el discurso que tienes para pronunciar, porque si lo hicieras, tu cuello se rompería, se caería. Entonces, hay algunas desventajas para las coronas, pero por lo demás, son cosas bastante importantes”, explicó Isabel. “Es difícil recordar que los diamantes son piedras… así que es muy, muy pesada”, dijo el entrevistador. “Sí”, agregó Isabel. “Afortunadamente, mi padre y yo tenemos la cabeza de la misma forma, una vez que te la pones se queda ahí. Es decir, se queda en su lugar por sí misma”. La emisión de The coronation fue el domingo e Isabel II describió la corona como “muy difícil de manejar” y destaca por su simpleza y cercanía al abordar este tema. Incluso, Bruce revela una anécdota que vivió con ella. En un momento, la reina en vez de levantarse para ir al lujoso mesón que soporta a la corona, hizo algo que probablemente todo ser humano flojo haga en su casa: prefirió quedarse sentada y arrastrar la mesa por el suelo. Y ante la mirada de su entrevistador por la acción que hace, ella minimiza esto y le dice: “Bueno, ya sabes, es mi corona”. Cada año, la mayor del clan Windsor luce la corona en la apertura del parlamento británico y aunque el paso del tiempo le haya pasado factura, el porte al lucirla siempre es el mismo.