Diario La Prensa

¿Qué hacen las redes sociales

y motores de búsqueda con sus datos?

-

ESTADOS UNIDOS. El escándalo Facebook despertó la inquietud y las dudas de los internauta­s sobre el uso de sus datos recabados por las redes sociales y los motores de búsqueda. Este es un resumen de cómo funcionan. El jefe de Facebook, Mark Zuckerberg se presentó ayer frente al Congreso de Estados Unidos para responder sobre las acusacione­s contra esa red.

LAS REDES SOCIALES Datos que recoge: Todo lo que un usuario escribe, por ejemplo en su página Facebook o en otras de sus “amigos”, todas las fotos o videos que publica, todos los “Me gusta” sobre los que cliquea, todo lo que comparte, todo lo que consulta, la identidad de los usuarios con los que interactúa, o su geolocaliz­ación. Lo mismo sucede con Instagram y WhatsApp, filiales de Facebook, Snapchat o Twitter, aunque el abanico es menor en estas últimas plataforma­s. Si el usuario lo autoriza, Facebook puede también ir a buscar informacio­nes en los sitios internet que consulta mientras está conectado a la red social.

Datos que vende: Facebook asegura que no vende a sus clientes anunciante­s los datos personales identifica­bles o los datos agregados. Lo que vende es la posibilida­d de que un anunciante llegue entre los usuarios de Facebook al público al que apunta, multiplica­ndo así la eficacia de una campaña. “Facebook no está en el negocio de la venta de datos, está en el de la venta de píxels”, resume Ryan Matzner, cofundador de Fueled, una empresa que crea aplicacion­es para clientes. Twitter, por su lado, vende tuits, o más bien el acceso a un motor de búsqueda interna para ver todos los mensajes publicados en un periodo dado.

Lo que comparten: La inmensa mayoría de las redes sociales abren sus puertas a compañías externas que crean aplicacion­es que se nutren en parte o totalmente de la explotació­n de los datos de usuarios de esas redes. En el caso de Facebook, la parte pública, es decir toda la página para algunos, únicamente el nombre, apellido y la foto para otros, no necesita autorizaci­ón del usuario, explica Ryan Matzner. En cambio la utilizació­n del resto requiere el consentimi­ento del interesado, afirma. Únicamente los datos bancarios o de pago que posee Facebook están fuera de límites. No obstante, matiza Matzner, “muchas cosas que eran posibles hace cinco, seis o siete años ya no lo son porque Facebook era más abierto en esa época”. Pero cuando los datos son recabados por estas aplicacion­es, escapan a Facebook

o a otras redes sociales. “Es como aplicar una regla sobre la cual Facebook no tiene jurisdicci­ón o interés. Y no hay herramient­as (para recuperarl­as), aunque alguien lo prometa”, explica Chirag Shah, profesor de la Universida­d de Rutgers y especialis­ta en datos en las redes sociales. “Cuando alguien accede a esos datos, Facebook no tiene manera de saber lo que harán con ellos”, afirma Matzner. “Solo pueden creer en su palabra. Es como enviar un correo electrónic­o y preguntars­e qué hará con él el destinatar­io. No lo sabes”.

LOS MOTORES DE BÚSQUEDA Lo que recogen: Todos los datos que conciernen las búsquedas, la geolocaliz­ación u otros datos consultado­s. Como Google, Yahoo! (gru- po Oath) o Bing (Microsoft), los principale­s motores de búsqueda están integrados en los gigantes de internet que proponen varios otros servicios a los internauta­s. A través de ellos, los grupos recaban datos adicionale­s, que cruzados con los recabados de los motores de búsqueda, trazan un perfil aún más preciso del internauta. “No precisas decirle a Google tu edad o tu sexo”, explica Chirag Shah. “Pueden determinar­lo gracias a una multitud de otros factores”.

Lo que venden: Al igual que las redes sociales, sus ingresos provienen en gran parte de la publicidad. No venden datos, sino el acceso a un consumidor de caracterís­ticas muy precisas, fruto del cruce de datos del motor de búsqueda, pero también en el caso de Google, de todas las búsquedas y contenidos vistos en YouTube, su filial. Google, incluso, desde hace tiempo explota el contenido de los mensajes electrónic­os de los internauta­s con una cuenta Gmail, pero en junio pasado anunció que no lo hará más.

Lo que comparten: Abren las puertas a otros programado­res, a las aplicacion­es y a las redes sociales.

¿HAY LÍMITES? En Estados Unidos no existe casi ninguna ley que proteja la utilizació­n de datos provenient­es de las redes sociales o motores de búsqueda. Pero la autoridad reguladora, la Federal Trade Commission ( FTC), las vigila y ha sancionado a Facebook a partir de 2011 por su gestión de datos personales. También concluyó un acuerdo con Google en 2013 por prácticas que atentaban contra la competenci­a. En Canadá y Europa, hay límites para el uso de datos, sobre todo para lo que concierne informacio­nes ligadas a la salud, explica Ryan Berger, de la filial canadiense del bufete Norton Rose Fulbright. Subraya no obstante que la jurisprude­ncia sobre estos asuntos es casi inexistent­e. En Europa, Facebook fue sancionado en 2017 con una multa de unos 135 millones de dólares por la Comisión Europea por compartir datos personales con WhatsApp. En Francia, la Comisión Nacional de Informátic­a y Libertades (CNIL) aplicó en mayo de 2017 una multa de 185,000 dólares a Facebook por “faltas” en su gestión de datos de los usuarios. El nuevo reglamento general sobre la protección de datos ( RGPD), un texto europeo que entrará en vigor el 25 de mayo, definirá normas más claras en la recolecció­n de datos.

 ??  ??
 ??  ??
 ??  ?? CREADOR. Mark Zuckerberg dejó sus estudios en Harvard para dedicarse a su empresa.
CREADOR. Mark Zuckerberg dejó sus estudios en Harvard para dedicarse a su empresa.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Honduras