Reunión histórica en Tela
Lo ocurrido el pasado jueves en Tela puede marcar un antes y un después en la historia de Honduras. Desde que tengo uso de razón, jamás se ha llevado a cabo en el país una reunión entre los dos actores claves para trazar una ruta de navegación que estimule la inversión con el objetivo de generar miles de empleos. Todo el Gobierno, encabezado por el presidente Hernández, y un centenar de los empresarios más prominentes de la nación, cara a cara, y en compañía de dos personajes ilustres, decidieron unir fuerzas para acabar con la pobreza. El objetivo fue claro: impulsar la economía para que crezca a un ritmo anual de 6%. Pero ¿cómo lograrlo? También lo definieron: uno, prepararle a los inversionistas mano de obra calificada; dos, darle al pueblo una atención de calidad en salud; tres, bajar aún más los índices de inseguridad, y cuatro, rescatar a la moribunda Enee. Mientras funcionarios e inversionistas definían los pilares que deben equilibrar la inversión nacional con la extranjera (esta última apenas representa un 18%), dos gurús escuchaban atentamente y cuando les tocó su turno de intervenir dijeron una frase mágica: “plan 20/20”. Tanto Ricardo Ernst, catedrático de la universidad de Georgetown, Estados Unidos, como Enrique Bolaños, presidente de Incae, alabaron el proyecto 20/20 y, sobre todo, calificaron de extraordinario el trabajo mancomunado al que se comprometieron el Gobierno y el sector empresarial. La suerte, Dios quiera, debería estar echada. Por fin, los dos bandos están en el mismo equipo y debe haber un ganador: el pueblo. La fecha 26 de abril de 2018 para la colectividad a lo mejor no representará nada, pero puede ser que para las próximas generaciones de hondureños sea el día en que el país cambió su historia de pobreza y subdesarrollo por una de progreso, unión y modernismo.
"POR FIN, EL GOBIERNO Y EMPRESARIOS ESTÁN DEL MISMO LADO”