Caravana de migrantes presiona a Trump
El Gobierno de EEUU se negó por segundo día consecutivo a recibir las peticiones de asilo de los indocumentados hondureños Trump arremetió de nuevo contra la caravana
La caravana de migrantes que ha provocado la ira de Donald Trump se ha propuesto acampar en Tijuana para presionar a las autoridades de Estados Unidos y pedir asilo
SAN DIEGO. Al menos 200 migrantes centroamericanos, la gran mayoría hondureños, acampan desde el domingo por la noche en la frontera entre México y Estados Unidos, luego que las autoridades de ese país les negaran por segundo día la entrada a suelo estadounidense. La Oficina de Aduanas y Control Fronterizo (CBP) de EEUU rechazó ayer nuevamente procesar las solicitudes de asilo de los integrantes de la caravana de migrantes en la garita fronteriza de San Ysidro, provocando una enérgica reacción de los defensores de derechos de los indocumentados. “Es una estrategia de este Gobierno para impedir que estos migrantes utilicen las vías legales y derechos que tienen para pedir asilo político, quieren que se arrepientan”, dijo Enrique Morones, director del grupo Ángeles de la Frontera. El abogado de inmigración Alex Gálvez, quien asesoró el domingo a los migrantes en la frontera sobre cómo pedir asilo, explicó que EEUU ha cambiado además su estrategia para recibirlos y que el primer contacto de los extranjeros ya no es con un ofi- cial de Inmigración, sino con personal de Seguridad. “Hay muchos obstáculos para poder llegar al primer contacto con el oficial que procesa la petición”, apuntó Gálvez.
‘Urge el muro’. En tanto, el vicepresidente de EEUU, Mike Pence, tachó de “débiles” e “ineficientes” las leyes migratorias de su país, durante una visita a Caléxico, en la frontera con México y a unas dos horas de donde se encuentra el campamento improvisado de los migrantes. “Me paro frente a ustedes cuando la mayor atención de la nación está enfocada en esta llamada caravana”, dijo Pence a un grupo de agentes fronterizos. “Como dijo el Presidente, esta situación es el resultado directo de nuestras débiles leyes de inmigración y nuestras porosas fronteras”, agregó. Pence describió a los migrantes como “víctimas” de activistas y contrabandistas y exhortó al Congreso a cerrar los “peligrosos vacíos legales” que permite a las personas pedir asilo en Estados Unidos en vez del primer país al que llegan a salvo. “Se necesita un muro en la frontera y vamos a tener seguridad en la frontera”, señaló, destacando el “gran impacto” de la Guardia Nacional en la zona.
Abarrotados La garita de San Ysidro es el cruce fronterizo más ocupado del mundo, con capacidad para 300 personas.