Con las lluvias...
Nun ca llueve a gusto de todos, según queda anual mente en evidencia pese alas cada vez más ir regulares temporadas de lluvias que agravan la endémica vulnerabilidad de nuestro país ante los fenómenos naturales. Años después del Mit ch todavía se recurría a los graves daños causa dos por el huracán, pero a casi dos décadas seguir señal ando esta causa es intentar ocultarla irresponsabilidad colectiva porno reparar los daños y, lo más grave aún, el deterioro constante a que es sometido el ambiente por la invasión o explotación de los recursos naturales. La Comisión Permanente de Contingencias( Cop eco) ha e mito la situación de alerta en siete departamentos en los que las lluvias han causado mayores problemas por aumento y desbordamiento de ríos y quebradas, por desliza miento y derrumbes dejando incomunicadas comunidad es, cuyas actividades agrícolas y la llegada a los mercados dependen del tránsito por carreteras o caminos. Las a tu ración del terreno, afectado con irracionales descombr os por invasión ganadera o preparación para la siembra incrementa la vulnerabilidad que se traduce en desgracias y perjuicios para la población en el área rural. Distinto, pero quizás más grave, es la situación en áreas urbanas, particularmente en aquellas colonias que han ido recibiendo la migración del interior en busca de trabajo, educación para los hijos y salud. Lo accidentado de la oro grafía multiplica el riesgo de desgracias como ocurre con la llegada de las lluvias, sin embargo, agua necesaria para el consumo humano, para la higiene, actividades productivas yparaelcampoo. Por ello, la bendición de la lluvia, pese a los trastornos, es recibida con el buen augurio de acabar con los racionamientos del vitallíquido. En países donde la lluvia se congela, la sabiduría popular enseña ,“año de nieve, año de bienes ”, porque es el agua concentrada y almacenada en las montaña que irá llegando gradualmente a los val les. Entre nosotros, aplicamos aquello“agua que no has de beber déjala correr” yasílas ricas cuencas hidrográficas contribuyen escasamente o no como debieran aprovechar separa atender las necesidades de las personas y los requerimientos del sector productivo. Y si a ello sumamos la muy es casa conciencia para protegerla naturaleza que es protección de nosotros mismos, y la prevención, pese alas muestras del cambio climático ya encima, no encuentra lugar en la conducta individual o colectiva, habrá que fortalecer aCop eco, pues las emergencias, ayer eran con huracanes y tormentas, hoy con las primeras lluvias y mañana con cuatro gotas, porque la naturaleza no perdona el daño que se le hace.