La última frontera
El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, ordenó la creación de una fuerza militar dedicada a las operaciones en el espacio, con el fin de garantizar el “dominio” estadounidense del Cosmos y contrarrestar los avances de China y Rusia. Trump anunció que ha ordenado al Pentágono que “comience inmediatamente el proceso para establecer una fuerza espacial como la sexta división de las Fuerzas Armadas”, al mismo nivel que los Ejércitos de Tierra, Armada, Fuerza Aérea, Cuerpo de Marines y Guardia Costera. Constituir una nueva división de las Fuerzas Armadas requerirá el visto bueno del Congreso, y no está claro que Trump pueda convencer a los legisladores de la necesidad de establecer un nuevo ejército, algo que no ocurre desde 1947. La creación de la nueva división, Fuerza Espacial, sería la primera en 71 años. Hasta ahora la más joven es la Fuerza Aérea, que se sumó a la estructura militar justo después de la Segunda Guerra Mundial. La creación de las ramas se ha hecho en función de los avances tecnológicos. La posición del presidente Trump puede resumirse en las siguientes frases. “El espacio es un dominio de guerra, como la tierra, el aire y el mar”. “No queremos que China, Rusia, y otros países nos lideren. Siempre hemos liderado”. “No es suficiente tener simplemente una presencia estadounidense en el espacio. Debemos tener el dominio”. Las actividades militares de Estados Unidos en el espacio tendrían un límite teórico, dado que el Tratado del Espacio Exterior, del que Washington es parte, prohíbe el establecimiento de bases militares en la Luna u otros satélites o planetas y las pruebas armamentísticas en el espacio. La lucha por el poder regresa a la última frontera. Máster en Relaciones Internacionales y en Estudios Asiáticos