Nos sale sobrando
Íbamoscaminoalcentro comercial. Caminoque, en honoralaverdad, estaba cuajadodesosiegoytranquilidadydespedíaeseolora complacenciaquefortaleceel ánimoyque, comoesnotorio, abundacuandolascosassalenbieno, almenos, parecido aloquesehabíapensado. De pronto, enunaintersección dondeteníamosquedoblara laizquierda, aparecióporla derechaunbusitodetransportepúblicoysinesperar aquelediéramospasada (obviamente, tambiénquería doblarhacialaizquierda) se metióysedetuvoinmediatamentedespuésdemeterse ydoblar. Increíble, ¿noles parece?, peroesonofuetodo. Alaveztuvimosqueesperara queunospasajerossebajaran (enunlugarnodestinado paraello), vercómopagaban conunaparsimonialóbrega yaguantarlosintentosde hacer“música” delconductor deatrásconlabocinadesu carro. Unavezreanudadoelcamino empecéacavilarentodo aquello. Loprimeroquepenséfue ¿quésucederíasilos quenoshubiéramosmetido ydetenidodeesamanera hubiéramossidonosotros? Talvezuninsultoopalabras duras, soeces, peroconmayor seguridad, sibienencarácter deteoríaoespeculación, pues cadapersonaesdiferente: molestia, enfado, crítica, ya quenosepuedeentender cómoalguienpuedeactuar así(perocuandolestocaa ellos, esdecir, alosquese enfadanoquesemolestany critican, lohacenigual;“calcadito”, diríanalgunos). Ylo segundoquepenséfue ¿por quéasí? Porqueyocreoque estoesmásqueevidente, es decir, aquísípodemosasegurarquenopuedenpensaren losdemás. Tantoaquellosque necesitanbajarseenunlugar quenoesdestinadoparaello, comoaqueloaquellaquelos conducehastaallí, soloandan pensandoenunacosa: sus particularidadesyconveniencias; elprójimo, por tanto, salesobrandoenesta trama. Deahí, pues, elreparo bíblico:“Amaatuprójimo comoatimismo”.