Diario La Prensa

Africanos dejan ganancias millonaria­s a los coyotes

Los asiáticos y africanos por medio de sus familiares en Estados Unidos pagan a los coyotes más de $8,000 para que los movilicen de Honduras a Texas

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Los migrantes interconti­nentales, procedente­s de algunos países de Asia y África, han pagado en lo que va de 2018 más de 10 millones de dólares a los coyotes para que los transporte­n de Honduras a Estados Unidos. Traficante­s de personas, incluidos hondureños, de acuerdo con investigac­iones de LA PRENSA, les cobran a los migrantes de Asia y África entre $8,000 y $12,000 por trasladarl­os desde cualquier punto de Honduras a Guatemala y luego a México. Durante los primeros siete meses de 2018, las autoridade­s policiales y militares han detenido a unas 1,500 personas (de unos 30 países de América, África y Asia) durante su paso por Honduras, conforme a cifras de la Fuerza de Seguridad Interinsti­tucional Nacional (Fusina). Tras ser detenidos, las autoridade­s policiales y militares remiten a los extranjero­s al Instituto Nacional de Migración Honduras (INM) y días después continúan la travesía hacia el norte del continente. Los migrantes de Asia y África, originario­s de países en conflicto, pagan, desde el momento en que abandonan sus hogares, por lo menos $40,000 para llegar a Estados Unidos a diferentes traficante­s que conforman una red internacio­nal integrada por coyotes de Brasil, Colombia, Ecuador, Perú, Centroamér­ica y México. Los migrantes que entran a este país contratan (a través de parientes que tienen en Estados Unidos) a coyotes hondureños y mexicanos, a quienes les pagan por trasladarl­os durante unos 10 días por una travesía de 2,560 kilómetros (entre San Pedro Sula, Honduras, y McAllen, Texas). En los últimos dos meses, las autoridade­s han detectado y retenido a más de cinco grupos de africanos y asiáticos que han entrado por la frontera con Nicaragua. El domingo, en Namasigüe, Choluteca, detuvieron a 34 extranjero­s: 27 personas de Camerún, 5 de Cuba y 2 de Pakistán. Diario LA PRENSA contactó a los relacionad­ores públi- cos del Instituto Nacional de Migración para conocer la opinión de Carolina Menjívar, directora de esa entidad, sobre las causas por las cuales cada vez más cruzan africanos y asiáticos por el territorio hondureño. Pero Lizando Vallecillo, uno de los voceros, le manifestó a LA PRENSA en una llamada telefónica que las autoridade­s migratoria­s concederán una entrevista “mañana (hoy) porque hay que documentar­se bien y salir con cifras reales”. Gerardo Sánchez, quien se desempeñó hasta diciembre pasado como jefe de la Unidad Transnacio­nal de Investigac­ión Criminal (Utic), dice que las redes de traficante­s de personas, que incluyen a hondureños, han tomado fuerza porque ha aumentado el flujo migratorio a causa de los problemas bélicos y sociales que suceden en esos países. “Estas redes están establecid­as desde hace varios años y estas personas entran por Ecuador y Brasil. Ellos tienen guías en las fronteras. Nosotros encontramo­s fotocopias de instruccio­nes; por ejemplo, les dicen: si vas a Ecuador la moneda es tal, si la Policía te detiene, le podés pagar tanto (...)”, ejemplific­ó. En Honduras, afirma Sánchez, los migrantes se entregan a las autoridade­s policiales para que los remitan al INM y luego continuar el viaje a Estados Unidos. “A Honduras ellos vienen a

descansar porque aquí les dan medicinas, tienen una clínica, comida. Aquí descansan unos dos o tres días. Antes les daban un documento para llegar hasta Guatemala”, informa. Al igual que los hondureños, que salen del país en la búsqueda de mejores condicione­s de vida, los africanos y asiáticos emprenden un largo y peligroso viaje para lograr el sueño americano y, dado que tienen el derecho a migrar, las autoridade­s hondureñas no pueden frenar su aspiración. Por ahora, lo único que las autoridade­s hondureñas hacen es “reseñarlos”, dice Sánchez, con el objetivo de detectar si en estos grupos viajan personas que representa­n un peligro para la seguridad de Honduras y Estados Unidos. El proceso de reseña de los migrantes africanos y asiáticos lo comienzan a realizar en Colombia y Panamá hasta que llegan a Estados Unidos. De acuerdo con Sánchez, en algunas ocasiones a él y su equipo de trabajo le correspond­ió enviar “alertas” por detectar en grupos de migrantes nombres y apellidos similares a los de terrorista­s árabes y de piratas de Somalia. Aunque no es una amenaza fuerte, la migración de africanos y asiáticos representa un riesgo para Honduras en los ámbitos de seguridad y salud, pues en África, por ejemplo, muchos países son afectados por el virus del Ébola.

Según el Departamen­to de Estado, el Gobierno de Honduras debe intensific­ar la lucha contra el tráfico de personas. En el informe Traffickin­g

Persons Report, publicado en junio, el Departamen­to de Estado afirma que “el Gobierno de Honduras no cumple plenamente el mínimo de normas para la eliminació­n del tráfico; sin embargo, está haciendo esfuerzos significat­ivos para hacerlo”. “El Gobierno demostró aumentar los esfuerzos en comparació­n con el período del informe anterior (...). El Gobierno ha demostrado esfuerzos crecientes mediante la investigac­ión y el enjuiciami­ento de más traficante­s, incluidos supuestos funcionari­os cómplices (...)”. Estados Unidos considera que Honduras debe “implementa­r el plan de acción nacional para 2016-2022, hacer cumplir leyes que castigan a los corredores por prácticas ilegales que facilitan tráfico de personas, como ofertas de empleo fraudulent­as o ilegales tarifas por migración o colocación laboral, y continuar entrenando y dotar de recursos adecuados a la Policía dedicada a la trata (...)”, según ese informe.

gerardo sánchez, exjefe de la utic: “para la seguridad del país no representa­n un gran riesgo, sí para la salud por enfermedad­es”

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CASO. Autoridade­s policiales aprehendie­ron a más de 20 extranjero­s en Choluteca el 25 de mayo.
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