“Tenemos que mejorar en esas zonas”
Creo que estamos educando para una sociedad que ya no tiene pertinencia en el siglo 21. La lectoescritura y las matemáticas son fundamentales y son dos variables de una ecuación mucho más compleja, y ahí la culpa no es solo del sistema educativo. Hay que hacer un esfuerzo para que mejoremos en esas zonas. Nadie puede cuestionar la importancia turística de La Mosquitia e Islas de la Bahía; pero aunque mejoraramos los rendimientos en español y matemáticas con los estándares actuales y aunque el sistema educativo mejorara, la ecuación es mucho más compleja y pasa porque el Gobierno y la sociedad borren de su ADN el irrespeto a la política pública. Honduras es un país que perdió su diseño evolutivo y más o menos se está sosteniendo en un modelo educativo estrictamente reproductivo de perpetuar la norma que no es el que está siguiendo el resto de la humanidad. Entonces estamos educando para perpetuar un modelo que ya no representa una respuesta en mejora de calidad de vida, en salud, en balance entre vida y trabajo y en competencias. Las competencias del siglo 21 no son las plasmadas en nuestro sistema educativo y el diseño del mercado laboral que el Estado y la empresa privada han hecho para Honduras sigue todavía atado al modelo económico que nació arañando la tierra hace dos mil años en la Mesopotamia. Es imposible tener un modelo educativo de calificación A en una sociedad cuyo entramado estructural es de calificación C o B. Nosotros tenemos una economía que los economistas llaman la 2.0; mientras que los países desarrollados están ya en un modelo de economía 4.0 que gira alrededor del mundo digital.