Paulina deja que su ex vea a su hijo
SÉPALO. Gerardo Bazúa por fin pudo pasar tiempo con su pequeño Eros, tras cuatro meses de no verlo
MIAMI. Paulina Rubio (47) y su expareja Gerardo Bazúa (34) parecen haber llegado a un acuerdo por el bien de su hijo Eros, luego de que hace más de un mes el artista publicara en su Instagram que tenía cuatro meses de no ver a su retoño, ya que la cantante no se lo permitía. En aquel entonces, Gerardo amenazó a la artista con denunciarla a las autoridades si seguía negándole ver al niño. El pasado fin de semana, Gerardo fue visto llegando a la mansión que Paulina posee en Miami Beach, Florida, para recoger al pequeño Eros, de dos años, con quien salió caminando de la vivienda poco después mientras varios miembros del personal doméstico los despedían a la puerta. Los paparazis los fotografia- ron jugando en un parque y más tarde disfrutando de una comida juntos en un restaurante de hamburguesas, aunque cuando le abordaron para interesarse por cómo había sido el reencuentro con su niño, él se mostró tajante. “Lo agradezco, pero no hago nada cuando están mis hijos. Gracias, no te puedo decir nada. Ahorita estoy con mi hijo”, aseguró de manera amable pero firme a las cámaras del programa Suelta la sopa. Pese a su hermetismo, no cabe duda de que poder disfrutar de unas horas junto con su hijo habrá supuesto toda una alegría para Gerardo, quien también es padre de otros dos niños de una relación anterior. “Muero por verte sonreír. Te extraño con toda mi alma, Eros”, aseguraba él hace unos días en sus redes para mostrar al mundo la difícil situación que vive con la estrella de pop mexicana.