Pamplinas
La crónica anunciada que da cuenta de un eventual requerimiento fiscal por parte del Ministerio Público contra 500 sospechosos --entre funcionarios de la presente administración, burócratas de Gobiernos anteriores y diputados del Congreso Nacional-- por haber sustraído una cantidad de dinero que sobrepasa lo desfalcado al Seguro Social, no es más que una “torta y pan pintado”, como solía decir mi abuelita. ¿Y por qué digo esto? Sencillamente porque a posteriori nunca han podido o querido llegar al fondo de estos asuntos. Esta acción como es usual se limitará, para dorar la píldora, únicamente contra los chivos expiatorios, que son los funcionarios de tercera o quinta categoría, jamás contra los peces gordos. A estos les están dando la oportunidad para poner los pies en polvorosa y tomar las calzas de Villadiego para que huyan del país o se escondan de la acción de la justicia, como han hecho algunos. Véase si no el anuncio filtrado a los medios, en el cual se expresa que “unas 17 líneas de investigación están en proceso y en los próximos días la Fiscalía comenzará con una serie de requerimientos fiscales para llevar a los tribunales de justicia a los responsables que mantienen en cuidados intensivos a la Secretaría de Salud”. “En la lista figuran funcionarios y exfuncionarios de Salud, directores y administradores de hospitales, secretarias, jefes de almacenes de medicamentos, jefes de farmacia y jefes de compra en los 18 departamentos del país”. Además, continúa la nota, figuran empresarios que sobrevaloraron productos médicos y quirúrgicos vendidos y medicamentos vencidos. Señalándose entre otros como eventual incriminado a un diputado del Congreso Nacional propietario de una empresa farmacéutica que vendió pastillas a base de almidón, cuando todos sabemos de que se trata de una diputada cuya familia siempre ha realizado esta clase de negocios turbios a través de varias empresas relacionadas entre sí, muchas de ellas de maletín, percibiendo por esta estafa la bicoca de 440.2 millones de lempiras, solo por este ítem. Más 94.8 millones de lempiras por materiales quirúrgicos pirujos y 57 millones por supuestos insumos médicos que nunca ingresaron a nuestro empobrecido sistema de salud. Una verdadera danza de los millones que precisamente ha sido una de las causas de nuestro subdesarrollo y precariedad que son los motivos por los cuales los hondureños están huyendo en caravanas del país, según ellos lo han esgrimido, tratando de salir de la pobreza extrema que los corruptos y los depredadores del fisco como los relacionados anteriormente nos han sometido secularmente, a quienes en revancha se les está alertando para que huyan y eviten denunciar a sus secuaces enclaustrados en el poder público del Estado.
“ElanunciosobrE rEquErimiEntos fiscalEsEnsalud EsavisoparaquE rEsponsablE EscapEndEla justicia”