Sonda de la Nasa aterriza en Marte
Servirá para preparar una futura incursión con exploradores humanos para la década de 2030
PASADENA. “¡Aterrizaje confirmado!”: la sonda estadounidense InSight se posó ayer en suelo marciano y ya envió la primera foto de la superficie del planeta rojo. Tras siete años de trabajo y siete meses de viaje por el espacio, la sonda estadounidense InSight “amartizó” y poco después envió la imagen. Cada etapa exitosa de esta milimétrica y arriesgada operación despertó una algarabía en el centro de control del Laboratorio de Propulsión a Chorro de la Nasa en Pasadena, California. El “aterrizaje confirmado” en la voz de una de las operadoras llevó al resto de sus colegas en el control a gritar de alegría y abrazarse en celebración. “Fue intenso”, resumió el director de la agencia espacial estadounidense Jim Bridenstine. “Es una experiencia única, increíble”. “Todo lo que aprendimos sobre Marte hasta este momento nos ayudará a entender cómo hacer investigaciones in situ... InSight puede proveer importante información sobre si hay agua líquida en Marte e incluso dónde está”, mirando hacia una misión humana al planeta. El proceso de “amartizaje” fue
perfecto: la activación del paracaídas, el despliegue de sus patas y la reducción de velocidad de 19,800 km/h a 8 km/h en apenas siete minutos. La primera foto fue enviada por dos satélites que acompañaron al InSight durante su travesía a Marte.
InSight en Twitter. “Mi primera foto en #Marte”, escribió la Nasa en una cuenta creada para la sonda. “La tapa de mi lente aún no fue retirada, pero tenía que mostrarles un primer vistazo de mi nuevo hogar”, dice
la leyenda que acompaña la primera foto. Es la primera vez desde 2012 que un artefacto logra posarse sobre Marte, después de que lo hiciera el vehículo Curiosity de la Nasa, el único actualmente activo en la superficie del planeta rojo. Solo EEUU ha logrado colocar artefactos allí, invirtiendo en estas misiones con el objetivo de preparar una futura incursión con exploradores humanos para la década de 2030. Pero más de la mitad de los 43 intentos por llevar a Marte robots, satélites u otros -ejecu-
tados por agencias espaciales de todo el mundo- han fallado. La sonda deberá escuchar y escrutar el interior de Marte para intentar develar los misterios de su formación, hace miles de millones de años. Conocimientos que podrían permitir posterior mente comprender mejor la formación de la Tierra, el único planeta rocoso del que se ha estudiado realmente su interior. Numerosos científicos europeos han contribuido con los instrumentos que viajan a bordo de InSight.