Isis resiste ofensiva en último bastión en Siria
Los yihadistas raptaron a más de mil civiles y se atrincheraron en una aldea resistiendo la ofensiva kurda-árabe
DAMASCO. Unos pocos yihadistas defendían ayer con obstinación lo poco que queda del “califato” del Estado Islámico (Isis), atrincherados en un reducido sector en el este de Siria adonde impiden a unos dos mil civiles huir de la ofensiva de las fuerzas kurdo-árabes apoyadas por la coalición internacional. Las Fuerzas Democráticas Siria (FDS) prevén anunciar su victoria sobre el Isis “en los próximos días”; pero los terroristas, atrincherados en el pueblo de Baghuz, en menos de medio kilómetro cuadrado, libran una feroz resistencia. El presidente estadounidense Donald Trump prometió una pronta derrota de la organización ultrarradical. Ayer exhortó a sus aliados europeos a repatriar y juzgar a los extranjeros del Isis detenidos en Siria. “Estados Unidos pide a Gran Bretaña, Francia, Alemania y otros aliados europeos que repatrien a más de 800 combatientes del Isis que capturamos en Siria para que sean juzgados”, declaró. “No hay alternativam ya que estaremos obligados a liberarlos. Estados Unidos no quiere que estos comba-
tientes del Isis se esparzan por Europa”, insistió. El anuncio de la victoria contra Isis podría iniciar la retirada de los dos mil militares estadounidenses desplegados en Siria, lo que inquieta a sus aliados. Pero en la provincia de Deir Ezzor, en la frontera con Irak, la última batalla aún no comienza, a pesar del apoyo de la coalición internacional liderada por Estados Unidos. Los terroristas plantaron un océano de minas y cavaron túneles para esconderse. Además, lanzan ataques kamikazes. El grupo se encuentra rodeado “y tiene como rehenes a miles de civiles, que se rehúsan a liberar”, indicó ayer Mustefa Bali, portavoz de las FDS.