Mercancía y mercancías
“Al usar fertilizantes orgánicos no solo somos más amigables con el medio ambiente, sino que protegemos la salud”. Amigable significa amistoso, cordial; pero en los últimos tiempos, “amigable” se utiliza como prosopeya, es decir, atribuir a los seres inanimados o abstractos características, acciones, cualidades, propias de los seres animados. Decir que se deben utilizar materiales amigables con el ambiente es correcto; sin embargo, no se debe abusar de este adjetivo, más que todo en el lenguaje objetivo, como es el periodístico. Bien se pudo decir “Al usar fertilizantes orgánicos no solo somos más colaboradores con el medio ambiente, sino que protegemos la salud”. Hay otra metáfora que ya comienza objetivarse en el lenguaje periodístico, veamos: “... con el fin de garantizar que al concluir la reconstrucción del corredor se trate de una obra que garantice una vida útil de 30 años” es un ejemplo que cualquiera lo comprende; pero “vida” resulta un tanto gastada al emplearla en contextos no literarios; en consecuencia no está de más la expresión “... con el fin de garantizar que al concluir la reconstrucción del corredor se trate de una obra que garantice una duración de 30 años”. Hace unos días leí en un medio el titular “Hallan túnel de la Salvatrucha en El Merendón”, barrunté que esa galería era para salir escondido de un lado a otro; pero al leer la nota supe que no era túnel, sino un refugio subterráneo; no obstante, en las subsiguientes publicaciones parece que los redactores se dieron cuenta que eso no era túnel, sino simplemente una guarida bajo tierra, escondida, puesto que no cumplía con las condiciones para ser túnel. Las palabras van perdiendo significado según el uso: “La carretera es fundamental para impulsar el turismo y la economía local por medio del traslado de mercancía”, expresión en la que cualquiera diría que la última palabra tendría que ir en plural: pero no, la oración está correcta porque “mercancía” implica todo lo que se puede vender: “Tiene suficiente mercancía en su tienda”, es decir, suficientes cosas para vender. En cambio, “mercancías” es tren que transporta productos de venta o compra: “Espero el mercancías y luego el tren de pasajeros”. Por el impulso de los hablantes ahora se está usando mercancías como plural de mercancía, y es válido.