DESAPARECIDOS DE LA LIMA
SE INICIA LA BÚSQUEDA DE CUATRO
SAN PEDRO SULA. Angustiados y desesperados se encuentran los familiares de cuatro personas que desaparecieron la tarde del miércoles en La Lima. Tres de los desaparecidos fueron identificados por sus parientes como José Gerardo Alvarado (de 35 años), su hijo José Gerardo Alvarado (de 15) y su yerno Irvin Antonio Claros Burgos (de 22).
El otro desaparecido es el menor Carlos David Aguilar (de 14), amigo de los Alvarado y de Irvin Antonio Claros Burgos.
Los familiares de los dos menores y de los otros dos hombres relataron que el miércoles a eso de las 3:00 pm ellos salieron de sus casas en la colonia 23 de Septiembre, de La Lima, después de almorzar porque recibieron una llamada comunicándoles que hicieran unos viajes cargando arena. Luego de recibir la llamada telefónica, los cuatro se fueron a cargar la arena en las dos carretas haladas por caballos en las que trabajan.
En una carreta se fueron José Gerardo Alvarado y su hijo y en la otra Irvin Antonio Claros Burgos y su amigo Carlos David Aguilar.
Cuando eran las 6:00 pm y no regresaban, los familiares empezaron a llamarlos a los celulares y sonaban apagados, lo que causó preocupación entre ellos. Indicaron que les extrañó que no llegaran porque por lo general sus parientes en las tardes salen a cortar zacate para los caballos y después se van para sus casas. Al ver que eran las 6:00 pm y no regresaban y no contestaban sus celulares empezaron a buscarlos. Relataron que la noche del miércoles encontraron las dos carretas abandonadas con los caballos en una de las calles de la colonia Sitraterco.
Una de las carretas estaba cargada de arena y otra no, lo que indica que no terminaron de hacer el viaje por el cual los llamaron.
Desde ese momento la desesperación se apoderó más de sus familiares e intensificaron la búsqueda con la ayuda de las autoridades policiales. La búsqueda de los cuatro desaparecidos la llevaron a cabo en las colonias La Mesa y Sitraterco y alrededores. También en las aldeas Copén Viejo y Copén Nuevo porque presumen que si los mataron podrían haber tirado sus cuerpos en el río Chamelecón.
Hasta las últimas horas de anoche no habían encontrado a ninguno de los cuatro desaparecidos.