Despido en Junta Universitaria daña gobernabilidad de la Unah
La decisión la tomó el Consejo Universitario bajo el argumento que los despedidos nombraron irregularmente a los integrantes de la Comisión de Control de Gestión (CCG)
TEGUCIGALPA. Al destituir a cuatro miembros de la Junta de Dirección Universitaria (JDU) de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (Unah), el Consejo Universitario rompió en parte el equilibrio de la gobernabilidad de la alma máter que impulsa las reformas en ese centro de estudios.
Así lo afirmó ayer Manuel Torres Calderón, uno de los funcionarios destituidos por el máximo órgano de la Unah. “Los pesos y contrapesos en el poder son fundamentales, y con esta decisión prácticamente (...) el rector interino (Francisco Herrera) tendrá el absoluto control de todos los órganos del gobierno universitario”, enfatizó Torres en una entrevista con Diario LA PRENSA. Según el oficio 97-2019, Manuel Torres, Aleyda Lizeth Romero Escobar, Valerio Gutiérrez López y Martha Arguijo Bertrand fueron separados por haber nombrado a los tres miembros de la Comisión de Control de Gestión (CCG) con cuatro votos de los siete miembros que integran la Junta de Dirección. En su lugar fueron nombrados de inmediato América Alvarado, Efraín Díaz Arrivillaga, Marilyn Martínez y José Ramón Martínez Rosa, quienes ya tomaron posesión de sus cargos.
Evitar corrupción. Torres expresó que la elección de los miembros de la Comisión de Control de Gestión (CCG) de la Unah se hizo para garantizar que no se cometieran actos de corrupción y se evitara la politización externa de la misma.
Según el Consejo Universitario, la separación de los cuatro miembros está apoyada en un dictamen del Tribunal Superior de Cuentas (TSC) que refrenda que el nombramiento de los miembros de la Comisión de Control de Gestión no siguió el proceso adecuado; pero según Torres, lo que emitió ese órgano
“Todo el procedimiento se hizo con base en la ley que respalda a la universidad nacional”
solo fue una opinión y no una recomendación de despido. El Consejo Universitario pidió a la JDU que revirtiera el nombramiento de la Comisión de Control de Gestión, pero estos se negaron, porque según ellos no existió ninguna violación a las leyes en su elección.
La historia. Torres recordó que el período de los tres miembros de la Comisión de Control y Gestión vencía en septiembre de 2018. En ese momento, la JDU solo contaba con cinco miembros activos de los siete que la integran debido a la renuncia de Ramón Romero en enero de 2017 y Melba Molina a mediados de 2018.
El Consejo Universitario aceptó la renuncia de los dos miembros en agosto de 2018 y nombró los sustitutos en febrero de 2019, explicó Torres. Por ley, el Consejo Universitario está obligado a reemplazar a los miembros que renuncian a la JDU, pero por alguna razón pasaron más de 20 meses para que se hicieran las sustituciones, dijo Torres. Torres detalló que antes de que se completaran los siete miembros, la Junta de Dirección Universitaria presumió en aquel momento que el quórum de ese órgano, tomando en cuenta antecedentes de la misma universidad, estaba cubierto con cinco integrantes que hacían mayoría calificada, sin tomar en cuenta a los otros dos que habían renunciado. Cuando eligieron la Comisión de Control de Gestión, recordó Torres, uno de los cinco miembros activos no asistió a la sesión y los cuatro restantes decidieron culminar el proceso por unanimidad.
La JDU es el órgano administrativo principal de la Unah, responsable de la planificación, organización, control administrativo y seguimiento de los resultados operativos de la institución.
El Consejo Universitario es el órgano máximo de la alma mater, responsable de concertar y generar las políticas y estrategias de la gestión universitaria, entre otras atribuciones.