El clima y precios preocupa productores de rambután

Muchas plantas no maduraron sus frutas por falta de lluvias; productores lamentan no tener acceso a financiamiento El precio de la caja ha bajado en los últimos años a L150

LA MASICA. El intenso verano afecta al menos el 50% de la cosecha de rambután en la parte alta del municipio de La Masica, considerado cuna de esta fruta exótica.

Los productores de la fruta, también conocida como licha, se enfrentan a los caprichos del clima, además de los problemas que deben asumir para sacar a tiempo sus cosechas. “Para nosotros ha sido algo complejo y difícil, porque el cambio climático nos afecta a todos, y probablemente se perdió el 50% de las cosechas a raíz del verano que imperó y que fue duro, de alguna manera las plantas terminaron abortando la fruta”, dijo Moisés Canales, productor de rambután en este municipio. Enfrentar esta realidad es más duro cuando no cuentan con otro apoyo más que el de sus propios esfuerzos.

“Es consecuencia también de que los productores no tenemos acceso a la banca, no hay financiamiento y si los hay, son exageradamente altos, y el productor se ve limitado”, indicó Canales. Para el productor es muy difícil poner un sistema de riego, y aunado a ello, esta es una zona compleja, donde significa que cuando vienen los tiempos de lluvias la infraestructura se daña y tenemos que repararla, agregó este productor de Las Minas de Oro.

Gracias al empeño de los productores y apoyo de las autoridades municipales, en algunas fincas se han logrado abrir calles. “Teníamos caminos que solamente en las espaldas de las personas se podía bajar el producto. Hemos tenido una pequeña ayuda del alcalde, nos ha permitido unos puentes en los vados, pero necesitamos la mano fuerte del Gobierno”, pidió Canelas.

Desde hace tiempo los productores también vienen lidiando con los bajos precios de la fruta. “Lamentablemente los precios están caídos y eso de alguna manera desmotiva a los productores”, recalcó.

Más cultivos. En este departamento hay cultivadas entre 3,000 a 4,000 hectáreas de rambután, una gran parte de las fincas se concentran en el municipio de La Masica. A pesar de estas dificultades, el cultivo sigue expendiéndose en la región.

“La Masica es el área que más licha tiene y es aquí donde se empezó en Atlántida, la tierra es de mejor calidad por eso muchos están sembrando”, dijo Neptalí Fuentes, otro productor de esta zona. Recuerda que hace unos años la caja de rambután se la pagaban a menos de 200 lempiras, “pero ahora la pagan a 150 lempiras, y eso en parte porque hay más tierras cultivadas”. Fuentes ofreció sus tierras a este cultivo desde 2005.

Aunque sea buena o mala la cosecha, en esta zona siempre hay empleos cuando inicia la siega, al menos unas tres mil personas se ven beneficiadas. “A nosotros nos pagan a 20 lempiras la caja de licha, y en temporada alta logramos llenar hasta 14 cajas y lo hacemos en tres horas”, comentó María Hernández, una de las muchas cortadoras de fruta que se mezclan en un ejército de hombres para esta temporada.

Tienen sus cultivos en la zona de Las Minas de Oro, la mayoría han sufrido perdidas en sus cosechas

Directos e indirectos genera el rambután en esta zona. La temporada alta inicia en agosto y termina en octubre.