Hernández: “Ese veredicto no es en contra del Estado de Honduras”
Los narcos que llevó la Fiscalía como testigos tenían el objetivo de “golpear” a su familia, señala el mandatario Argumenta que esos excapos mataron a más de 150 personas
El presidente Juan Orlando Hernández deploró ayer la condena en Estados Unidos por narcotráfico contra su hermano menor, Juan Antonio (Tony) Hernández, que consideró basada en testimonios “de asesinos”. “El jurado decidió tristemente creer en la palabra de un grupo de asesinos confesos, narcotraficantes, que tenían como objetivo golpear a mi familia, como una manera de vengarse por las decisiones que hemos tomado, y que los hizo pasar de ser amos y señores de regiones completas del país a tener que salir huyendo de Honduras”, expresó el mandatario en Casa Presidencial, acompañado por los ministros de Seguridad, Julián Pacheco, y de Defensa, Freddy Díaz.
El mandatario, quien desde el primer día del juicio ha estado reaccionado con declaraciones, agregó que su familia recibió el veredicto “con tristeza”. “Ahora en lugar de balas y proyectiles (los excapos) intentaron utilizar sus mentiras como armas contra el Gobierno que los combatió”, argumentó el mandatario.
Al Presidente le “causa sorpresa que los fiscales de Estados Unidos califiquen injustamente al Estado hondureño, que crean en declaraciones de esos criminales, para señalar a un país que decidió combatir uno de los más grandes flagelos que afecta a la sociedad norteamericana”. “En nombre del Gobierno de Honduras y de sus instituciones rechazo contundentemente que se califique a nuestro país como un narcoestado”, declaró.
“Han sido más de 67,000 muertes de hondureños el costo de la lucha contra la criminalidad y el efecto de este fenómeno delictivo; pero en los últimos años ese es el número de víctimas y la más grande tragedia que hemos tenido en la historia de la
“RECHAZO QUE SE CALIFIQUE A NUESTRO PAÍS COMO UN NARCOESTADO”
“EL JURADO DECIDIÓ TRISTEMENTE CREER EN LA PALABRA DE UN GRUPO DE ASESINOS”
JUAN ORLANDO HERNÁNDEZ Presidente de Honduras
república”, explicó el mandatario. “Gracias al esfuerzo de nuestras instituciones logramos convertir a Honduras en territorio hostil para los narcotraficantes”, sostuvo. Adelantó que su Gobierno continuará colaborando con las autoridades de Estados Unidos para combatir al narcotráfico. Anteriormente, el Presidente había reaccionado a través de su Twitter que había recibido con “tristeza” el fallo fundamentado en “testimonios de asesinos confesos”.
“Pueblo hondureño, quiero dejar claro al pueblo hondureño y a la comunidad internacional, ese veredicto no es en contra del Estado de Honduras”, dijo. En su opinión, “resulta indignante que los narcotraficantes y asesinos confesos sean presentados como que si tuvieran la misma credibilidad que los ciudadanos honestos, como si haber asesinado más de 150 hondureños no tuviera tanta importancia, como si lo importante es tratar de incriminar a otros en la búsqueda
de reducir sus penas a como dé lugar, al tiempo que protegen a sus verdaderos cómplices”. “Pero también debo decir que es increíble la capacidad que muestran esos criminales que fueron a servir como testigos de mentir impunemente, tratando de negar las acciones que el Estado hondureño ha desarrollado en la lucha contra sus actividades ilegales”, acotó. El Presidente expuso sus críticas en una conferencia de prensa un poco antes de que la familia Hernández emitiera un comunicado en el cual mostró su desacuerdo con el veredicto. El ministro de la Presidencia, Ebal Díaz, ante peticiones de algunos sectores de oposición tras conocerse el veredicto, dijo que “los que sueñan con la renuncia del Presidente (Hernández) pueden seguir soñando”. “Doce fiscales neoyorquinos, aunque sean buenas personas, no pueden creer el testimonio de delincuentes y narcotraficantes confesos”, aseveró.