Acude en rescate de amlo tras desafío del clan del chapo
VIOLENCIA. La humillación del cartel de Sinaloa a las autoridades mexicanas tras la liberación del hijo del Chapo Guzmán deja en evidencia el fracaso de la estrategia de seguridad de López Obrador
CIUDAD DE méxico. Dos días después de que el Cartel de Sinaloa desatara una batalla campal en Culiacán, Sinaloa, en un operativo para rescatar a Ovidio Guzmán, uno de los diez hijos del poderoso narcotraficante Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán, el mandatario estadounidense Donald Trump llamó a su homólogo Andrés Manuel López Obrador para solidarizarse. AMLO agradeció al magnate por su llamada y afirmó que le propuso un mayor control sobre el tráfico de armas desde Estados Unidos a México para evitar nuevos hechos violentos como el de Culiacán en el que murieron al menos 14 personas entre militares y civiles. “Las armas que vimos en Culiacán son armas calibre 50 que pueden fácilmente atravesar casi cualquier blindado, pueden destruir a una velocidad increíble y a distancias largas”, dijo el canciller mexicano, Marcelo Ebrard tras la conversación entre AMLO y Trump. El embajador de EEUU en México, Christopher Landau, aseguró que Trump prometió ayudar a su vecino en el combate al crimen organizado. “Dediquemos nuestra energía a derrotar a los delincuentes que nos amenazan a todos. Juntos podemos”, expresó el diplomático en su cuenta de Twitter.
El mandatario estadounidense envió una delegación a México que acordó con las autoridades de ese país “desburocratizar las respuestas institucionales, y sellar las fronteras” para evitar el tráfico de armas.
Ebrard agregó que Trump dijo estar “muy preocupado” por los videos que muestran a miembros del cartel de Sinaloa con rifles Barrett calibre 50 durante las balaceras en Culiacán. “Son armas de calibre 50 que pueden atravesar fácilmente casi cualquier blindaje”, indicó el canciller.
Y es que los sicarios del cartel de Sinaloa sobrepasaron en número y en poder de fuego al ejército mexicano durante el fallido operativo de captura de Ovidio Guzmán, que fue acorralado por varias horas en la casa de su novia en Culiacán, bastión del cartel fundado por su padre.
Ovidio, uno de los hijos de más bajo perfil del Chapo, logró que sus secuaces protagonizaran un pulso de fuerza contra una treintena de agentes de seguridad del que terminaron vencedores.
Según el New York Times, fueron dos los hijos del Chapo detenidos en Culiacán el pasado jueves, entre estos Iván Archivaldo Guzmán, primogénito del capo mexicano. El Chapito logró liberarse rápidamente gracias a la intervención de sus guardaespaldas, y acudió en rescate de su hermano menor convirtiendo a la capital de Sinaloa en una zona de guerra, que obligó a las autoridades a liberar a Ovidio para preservar “vidas” -en palabras del mismísimo presidente.
El error de cálculo de las fuerzas de seguridad, tildado de “precipitado” por el titular del Ejército, Luis Cresencio Sandoval, expuso una aparente falta de profesionalidad o disciplina. Pero no es la primera vez que ocurre con el clan del Chapo.
humillaciones Al gobierno
Durante varias décadas, el narcotraficante mexicano fue la prueba de las fallas en seguridad del país. Y sobre todo de la relación exis