31,688 asesinatos registró
Habitantes de 16 comunidades indígenas mantienen el bloqueo en la carretera Chilapa-huaycantenango
MÉXICO. Las autoridades mexicanas hallaron diez muertos dentro de dos vehículos abandonados, uno de ellos calcinado, en una carretera del municipio Chilapa Álvarez, en el sureño estado de Guerrero, confirmó la Fiscalía estatal.
“El día de ayer se localizaron dos camionetas, tipo redilas, ambas siniestradas y una de ellas calcinada. En las camionetas se encontraron cinco cuerpos en cada una; cinco de ellos totalmente calcinados”, detalló la institución.
Agentes policiales y militares acudieron el viernes al lugar de los hechos tras recibir el aviso de que una camioneta estaba incendiándose, dentro de la cual hallaron
México en los primeros 11 meses del 2019, un 2,7% de aumento en relación con el mismo periodo del 2018.
cinco cuerpos calcinados. Las autoridades encontraron también un segundo vehículo accidentado en un barranco de 100 metros de profundidad y pudieron extraer los cuerpos de los cinco fallecidos para su posterior identificación. La Fiscalía General del Estado de Guerrero comenzó las investigaciones para esclarecer el crimen y elementos de la institución se encuentran en la zona buscando pruebas como casquillos de arma de fuego.
De acuerdo con la prensa local, los diez asesinados eran integrantes de un grupo de músicos indígenas que regresaban de tocar cuando fueron interceptados por hombres armados en un retén instalado en la carretera a la altura de la comunidad de Mexcalzingo.
Se sospecha que los responsables del crimen fueron integrantes del grupo criminal de Los Ardillos, que mantiene enfrentamientos con policías comunitarios de la zona y con otras bandas criminales. En el estado de Guerrero, uno de los que registran mayor violencia y actividad de narcotráfico, operan al menos una veintena de grupos armados, entre autodefensas, policías comunitarias y carteles de las drogas, de acuerdo con fuentes oficiales. común en la comunidad de Terrón, en la comarca Ngäbe Buglé. Los asesinados son seis niños de entre 1 y 17 años y una mujer embarazada, madre de cinco de los menores ejecutados. Según los testimonios escuchados en la audiencia, los acusados amarraron y pegaron a los indígenas con la Biblia, palos y machetes hasta ocasionarles la muerte.