Diario La Prensa

Asesinan a seis personas en una aldea de Olancho

Seis muertos deja vendetta en Olancho

- JOSÉ ADALBERTO LOBO

CATACAMAS. Enemistade­s entre dos familias por la disputa de tierras habría dejado seis personas muertas y un niño de tres años herido en una zona montañosa de Olancho. Según informes de la Policía, el ataque fue ayer en horas de la madrugada en el caserío Las Delicias de Río Blanco, Catacamas. Este es un lugar poco poblado. Varios sujetos llegaron hasta la vivienda de la familia Lobo y los mataron a balazos.

Las víctimas ya han sido identifica­das como César Augusto Lobo Oseguera y su hijo José Adalberto Lobo Euceda (de 43 años),maría Evelia Hernández García (de 44), la esposa de Adalberto, y los hijos de la pareja Franklin (de 19), Katia (de 14) y Ariela (de 8) Lobo Hernández. Logró sobrevivir un niño de tres años.

La Policía tuvo conocimien­to del hecho ayer al mediodía. José Inés Herrera, poblador de Las Delicias de Río Blanco, dijo a medios de comunicaci­ón que “un amigo de él (de César Lobo), que de cariño le decimos Toñito, había quedado con César que iban a hacer unos silos y a picar un maíz para el concentrad­o del ganado; la sorpresa de él fue que al llegar a la casa de César se encontró con toda la familia muerta”.

Toñito, amigo de César Lobo, salió corriendo de la casa con rumbo al caserío Campamento Viejo, siempre en la misma zona, y avisó a la Policía. Varias patrullas partieron desde Catacamas y al llegar constataro­n que seis personas habían sido asesinadas y, en medio de la sangrienta escena, hallaron con vida a un niño de unos tres años, hasta el momento el único sobrevivie­nte del violento ataque. El menor fue ingresado de emergencia en estado de salud grave en el Hospital Santo Hermano Pedro, en Catacamas.

El motivo. Un fuerte contingent­e policial se desplazó para la zona. En primera instancia para levantar los cadáveres con personal del Ministerio Público y luego para iniciar las investigac­iones.

Las primeras indagacion­es determinan que la posible causa del hecho sea por enemistade­s personales derivadas por la disputa de un terreno con otra familia de la zona, hipótesis que será investigad­a en las próximas horas, informó la Secretaría de Seguridad.

Según el parte policial, el violento hecho ocurrió cuando la familia Lobo Hernández dormía.

Los seis cadáveres fueron trasladado­s desde la montaña hasta el Ministerio Público, en Catacamas, para después ser llevados hasta la morgue judicial en

Desde la capital salieron anoche para Catacamas dos médicos forenses y técnicos disectores para practicar las autopsias en aquella ciudad.

la capital; pero los parientes de la familia Lobo se opusieron a esto último. “Nosotros somos pobres, no queremos que se los lleven para Tegucigalp­a, yo soy la única hija y no quiero que se los lleven”, reiteró entre el llanto la señora Eufemia Lobo, hija de don César Augusto y hermana de José Adalberto.

Eufemia agregó que “mi papá nunca nos comentó nada, él iba a la iglesia y era evangélico”.

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AUXILIO. Un niño de tres años fue conducido al hospital Santo Hermano Pedro en Catacamas.

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