Ojos abiertos
Saltó la alarma, pero no llegó a susto. La Secretaría de Salud, con la aplicación de las medidas de prevención y control, descartó toda sospecha de la enfermedad respiratoria, coronavirus, en cuatro turistas, tres de China y uno de Estados Unidos. Rigurosidad, con la mayor cortesía y respeto, deben ejercer los empleados de Salud en los sitios de ingreso a nuestro país, pues sería catastrófica la llegada del coronavirus que ya traspasa las fronteras.
En China donde se originó la epidemia, en camino de pandemia, ya se ha extendido por todo el territorio, pues el Tíbet, la última provincia hasta hace unos días libre del patógeno, confirmó su primer caso.
La cifra oficial de muertes se halla muy por debajo de la real, según informaciones que han trascendido desde la ciudad de Wuhan, origen de la enfermedad. Si las grandes ciudades del gigante asiático, Pekín, Hong Kong, resienten las medidas restrictivas para tratar de contener la propagación de la enfermedad, Rusia ha sido tajante y cerró su frontera terrestre con China de más 4,000 kilómetros, para minimizar los riesgos de la propagación de la infección. A los viajeros de un crucero proveniente de España se les impidió desembarcar en Italia hasta realizar las pruebas a una de las turistas.
Hay más que nerviosismo mundial pues la imparable escalada en las cifras oficiales y la aparición de la enfermedad en países asiáticos, europeos y hasta en el norte de nuestro continente han hecho reaccionar a la Organización Mundial de la Salud y a la Organización Panamericana de la Salud, cuyos funcionarios alertan del grave peligro mundial. La enfermedad va saltando las fronteras pese a las medidas preventivas aplicadas según protocolos internacionales.
La evacuación de extranjeros de la ciudad fantasma, Wuhan, continúa con alto riesgo de que el coronavirus salga con ellos, tal como ocurrió con tres ciudadanos japoneses, dos de los cuales no presentaban síntomas.
Otros países también han posibilitado la salida de sus ciudadanos, pero aplicando estrictas medidas para prevenir la expansión de la enfermedad que ya ha afectado a personas que no han estado en China. La Secretaría de Salud señala: “Se recalca que Honduras no tiene casos sospechosos de la enfermedad respiratoria, pero mantiene bajo control la vigilancia de la salud de los mismos”, refiriéndose a los tres viajeros que llegaron al país y no presentaron síntomas. ¡Abrir bien los ojos y no dormirse!