Hermosa de pies a cabeza: rutinas que puedes hacer en casa
Limpia, exfolia e hidrátate desde la cabeza hasta los pies. Dale a todo tu cuerpo la atención que se merece
En estos tiempos de estar en casa conviviendo con la familia y contribuyendo al bienestar de la sociedad vale la pena mimarse.
A continuación, la doctora Marimar Guerra, especialista en medicina genómica y antienvejecimiento, nos da sus aportaciones para salir avante de este suceso luciendo plena.
Pelo. ¿Hace cuánto que no exfolias tu cuero cabelludo? Sabías que guarda muchas impurezas que pueden tapar el folículo y causar debilitamiento y hasta caída del cabello. Hay champús y productos especiales para este fin en la farmacia y puedes hacerlo dos veces a la semana si es graso, y si es seco, cada 15 días. Aprovecha para probar nuevos champús y acondicionadores, ya que el pelo se acostumbra a los productos habituales. Es tiempo también de aplicar mascarillas y tratamientos de acondicionamiento a partir de elementos naturales y vegetales.
Rostro. Utiliza un jabón suave para eliminar toxinas, sudor y restos de maquillaje. Después hay que aplicar un exfoliador dos veces a la semana para quitar células muertas. Luego debes aplicar un tónico o bálsamo y finalizar con una crema humectante y protector solar, aunque estés recluido en casa, ya que la luz de la computadora también causa daño. Atención especial a tus ojos, donde debes aplicar una crema especial para esta zona tan delicada.
Cuerpo. Hay que realizar una exfoliación en seco con un cepillo de cerdas naturales para dejar la piel limpia y que pueda respirar. Hazlo antes de bañarte siempre hacia arriba y con énfasis en zonas problemáticas o escondidas. Después puedes hacer una exfoliación con productos especiales en el baño y terminar con una buena aplicación de una crema humectante. Pon atención en las zonas que la requieren y que, a veces, con las prisas se olvidan, como los pies, las manos, los codos, las rodillas y el cuello. Realiza una rutina de ejercicios simple y sencilla pero de manera habitual. Si no tienes equipo o lugar puedes dar un paseo en solitario muy de mañana o por las noches cuando no haya mucha gente.