en memoria de 900 fallecidos
Madres, padres, abuelos, hijos, compañeros, amigos, vecinos. Hoy honramos a quienes no sobrevivieron a la pandemia y compartimos un mensaje de consuelo con los que lloran y sufren su partida
TEGUCIGALPA. Médicos, enfermeras, policías y bomberos son las profesiones que han enfrentado en la primera línea la defensa contra la pandemia en Honduras. Lamentablemente también son parte de los rostros de los 900 fallecidos por la enfermedad, 130 días después del primer caso registrado de covid-19 en el país este 11 de marzo.
Según las terribles cifras, al menos 50 hondureños dedicados a estas tareas de salvar vidas han muerto víctimas del feroz virus, dejando conmovidas a sus comunidades.
Una de las primeras pérdidas del gremio médico fue la muerte de la doctora Denisse Murillo, recordada como una gran colega, madre, esposa y médica de vocación, según las personas que compartieron con ella en su vida.
A partir de ese momento, los anuncios de fallecimientos de médicos y enfermeras se fueron multiplicando en las redes sociales. Así se supo de otros médicos que han caído en la pandemia como Alexis Reyes, Mario Benítez, Luis Reyes Jerezano, todos profesionales muy reconocidos pero que fueron sepultados de forma discreta. Hace unos días, el sábado 11, fallecieron otras dos personas del personal de Salud sospechosas de covid-19. Se trataba del doctor Carlos Yamil Maradiaga Muñoz y la enfermera Vilma Sagraria Merlo.
“Hablar sobre la muerte no es fácil, pero en este caso es necesario para hacer conciencia a la población”, dijo a LA PRENSA el doctor Hugo Fiallos, especialista en medicina interna. “Nosotros trabajamos muy de cerca con la muerte, pero nadie, nunca, jamás en 21 años de ser intensivista, habíamos visto muertes tan seguidas y tan sin sentido, sin sentido porque cada una de ellas se pudo evitar con una medida tan simple como quedarse en casa, cuidarse, y evitar la exposición de médicos y enfermeras”, lamentó el doctor.
Fiallos es médico desde 1992, actualmente es intensivista, trabaja como jefe de la unidad de cuidados intensivos del Hospital Militar y como intensivista de guardias en el Seguro Social. El médico dice que en estos cuatro meses, el personal de Salud ha vivido la experiencia de ver una y otra vez cómo los pacientes se ahogan y fallecen por no poder respirar y “esto nos ha minado emocionalmente”, sumado a la responsabilidad de informar del deceso de los enfermos a las familias que hasta el momento de la noticia aún confiaban en la recuperación de su pariente.
“Esta no solo es una enfermedad para ancianos, también tenemos atletas, gente joven, menores de cuarenta años en cuidados intensivos, no hay manera de predecir a quién le va a ir bien o mal”, señaló el doctor. Así como Fiallos, médicos del servicio sanitario público señalan que la mayoría de pacientes que han fallecido presentan comorbilidad, o sea una enfermedad preexistente. Entre estas enfermedades destacan la hipertensión, diabetes, cardiopatía, obesidad y enfermedades pulmonares. También se ha recomendado al gremio médico reasignar a los doctores que tienen arriba de 50 años o que presentan comorbilidades para que no se expongan a ver pacientes de covid-19 y retirar a los que tienen más de 58 años.
Los médicos también señalan que aunque las muertes siguen en aumento, la población sigue sin acatar la orden de quedarse en casa, lo que ha elevado el grado de carga viral en las
Salud
Hasta el domingo 22 doctores y ocho enfermeros murieron por covid-19. Según cifras oficiales, hay más de 2,601 casos positivos, de los cuales solo se han recuperado 329.
Comorbilidad
Las cifras indican que cerca del 75% de los fallecidos padecía enfermedades crónicas antes de contraer el virus. El 54% tenía una enfermedad y el 21% presentaba dos o más.
ciudades más importantes y a su vez que no tienen la certeza que el equipo de bioseguridad que se les proporciona sea de la correcta calidad.
Las cifras. Cuatros meses y nueve días después del inicio de la pandemia en Honduras, el Gobierno ha confirmado 33,835 casos positivos de covid-19 y la muerte de 900 personas, siendo los departamentos de Cortés y Francisco Morazán los que presentan más decesos por el virus con el 44% y 35%.
Del total de pacientes diagnosticados con covid-19 se encuentran 1,582 hospitalizados, de los cuales 988 están en condición estable, 537 en condición grave y 57 en la unidad de cuidados intensivos.
Sobre los 900 fallecidos confirmados por covid-19 hasta el 19 de julio, y según la base de datos obtenida con los informes del Sistema Nacional de Gestión de Riesgo (Sinager), resulta que tres de cada 100 hombres que contraen el virus fallecen. Para las mujeres, dos de cada 100 fallecen. Hasta la fecha van 579 personas del sexo masculi
UCI
La tasa de recuperación de los pacientes que entran a unidad de cuidados intensivos es del 70%, esto quiere decir que 7 de cada 10 se recuperan y 3 de cada 10 fallecen por el virus.
no que han fallecido y 302 del femenino.
Los municipios con mayor número de decesos son el Distrito Central con 310 (representan el 34.5% del total a nivel nacional), San Pedro Sula registra 253 (28.2%), Choloma 44, Puerto Cortés 41, Villanueva 25, La Lima 16, Choluteca 18, La Ceiba 13 y El Progreso con siete fallecidos.
Las personas con edad en el rango de 61 a 70 años son las que más han perdido la batalla contra el coronavirus, hasta el sábado se contaban 244 muertes, en el rango de 51 a 60 años han fallecido 177 y en el rango de 71 a 80 hay 164 muertes. El promedio de muertes diarias confirmadas de covid-19 por el Gobierno en las últimas tres semanas a sido de 22.1 al día. A nivel centroamericano, Honduras tiene la cuarta tasa de mortalidad más alta con 2.7%. En primer lugar se encuentra Guatemala con una tasa de 4.84%, seguido de Nicaragua con el 3.15%. La tasa de mortalidad en El Salvador es de 2.83%, en Panamá de 2.05% y en Costa Rica de apenas 0.56%.
Alarma
Desde el sábado 27 de junio hasta el 19 de julio, el Gobierno confirmó 474 muertes por covid-19, o sea, casi el 53% del total de fallecidos. En los tres meses y medio anteriores se confirmaron 426 muertes.