10 consejos para cocinar con vino 7
Fiona Beckett incluye estos tips en su libro “Wine Lover’s Kitchen”, en las que presenta 70 recetas con vino
Si quiere dar un giro culinario al descorche o utilizar ese vino sobrante en alguna receta, Fiona Beckett presenta en su libro Wine Lover’s Kitchen el decálogo de oro para lograrlo con buenos resultados:
1
Si no lo tomaría, no puede cocinar con él. Los ingredientes de su receta necesitan acompañarse de un vino fresco y sin defectos; puede echar mano del vino sobrante.
2
Use esas sobritas. Conserve las sobras de vino en recipientes más pequeños, para no oxigenar en exceso y utilícelo preferentemente en los cinco días subsecuentes a la apertura de la botella. Para congelar, eche mano de una bandeja de cubos de hielo.
3
Considere los vinos dulces. Aunque sea aficionada a los vinos secos, pruebe cocinar con opciones más dulces, como un Grenache o Zinfandel, que probablemente no pediría por copeo, pero que pueden acompañar bien una receta o integrarse en un coctel.
4
Olvide los vinos “para cocinar”. Las etiquetas clasificadas como “vino para cocinar” tienden a ser de calidad baja y no distan mucho en precio de una botella accesible de vino regular.
5
No utilice un vino muy caro. La única circunstancia en que la autora lo recomienda es al necesitar una pequeña cantidad de vino para terminar la receta y sin tener que abrir una botella nueva. Es decir, si existe la posibilidad de tomar solo un poco del vino ya destapado.
6
La elección tiene que ver con la técnica. Utilice un vino de mejor calidad para deglasar una sartén que para una cocción lenta. Un buen truco es añadir una pequeña cantidad de vino de mayor calidad al final de una cocción muy lenta.
Para ir a la segura. Los vinos más versátiles para cocinar, usualmente, son los blancos secos sin barrica, elaborados con Pinot Grigio, o los tintos no muy tánicos, como los Merlot. Vinos muy aromáticos, como Riesling y Gewürztraminer, son excelentes compañeros de salsas cremosas.
8
Jerez, oporto, madeira, marsala... Los vinos fortificados son excelentes en la cocina: una pequeña cantidad aporta gran fuerza y profundidad a los platos.
9
Acentúe ese carácter. Reducir un vino a fuego lento acentúa su carácter dominante (dulzor, taninos o acidez) y es una forma útil de concentrar el sabor cuando se desea agregar una pequeña cantidad a un plato o aderezo.
10
Cocción completa y fuego lento. Utilice el vino como ingrediente para marinar solo en carnes que llevará a una cocción completa, no media ni tres cuartos. Si no son cocciones lentas que superen las 3 horas, habrá residuos de alcohol en el plato.