Posibles alineaciones
las cuatro ocasiones que la disputó. El partido llega rodeado de las particularidades obligadas desde la pasada primavera por la pandemia de coronavirus, aunque la UEFA ha fijado esta cita como una prueba para el regreso de los aficionados a los estadios y estudiar el impacto en el llamado ‘Protocolo de Regreso al Juego” de este organismo. Así, el Puskas Arena, con una capacidad que supera las 60,000 localidades, estará abierto en un treinta por ciento de su aforo y la UEFA facilitó a cada club contendiente 3,000 entradas, de las que el Sevilla ha hecho uso de medio millar y el Bayern de unas 2,000, todo debido a los inconvenientes y al recelo por los viajes y estrictos protocolos sanitarios exigidos. En el plano deportivo, el conjunto andaluz llega a esta Supercopa con poco más de dos semanas de pretemporada, periodo en el que ha disputado tres amistosos con formatos atípicos, uno ante el Levante y dos frente al Athetic Club. Tuvo además el preparador sevillista, Julen Lopetegui, el inconveniente del positivo por covid-19 del delantero Munir El Haddadi, quien tuvo que quedarse en cuarentena y que no se ha unido al trabajo del grupo hasta el pasado domingo, por lo que es poco probable que esté en el mejor tono para medirse al conjunto germano.