Mipymes de LA, asfixiadas por covid
Un año y medio de pandemia ha hecho estragos en las micros, pequeñas y medianas empresas latinoamericanas, el eslabón más débil del tejido económico de la región y cuya recuperación se antoja cuesta arriba por las dificultades endémicas para acceder a créditos bancarios.
Valentina Sáez hizo “lo imposible” por tratar de salvar su pequeña abarrotería en el centro de Santiago de Chile, donde también vendía comidas diarias. Recorrió todas las sucursales bancarias del barrio, postuló a ayudas sociales y pidió dinero a todos sus allegados, pero a finales de abril se vio obligada a cerrar.
La nueva cuarentena decretada a inicios de ese mes vació aún más la zona de oficinas donde se ubicaba su local y la búsqueda de fondos fue infructuosa. Su negocio es una de las 2,7 millones de empresasformales-delasqueel99%sonmipymesque han echado el cierre en la región desde el inicio de la crisis sanitaria, lo que supone la pérdida de al menos 8,5 millones de puestos de trabajo, según la Cepal.
El 53 % son comercios al por menor, seguido de negocios dedicados a servicios personales, como peluquerías, gimnasios y talleres (12 %), y hoteles y restaurantes (11 %).
La pandemia, que ya deja 37,3 millones de infectados y 1,2 millones de muertos en Latinoamérica y mantiene aún a muchas economías funcionando a medio gas, hizo caer el PIB regional un 7,1 % en 2020, la mayor recesión de los últimos 120 años. Las tasas de pobreza y pobreza extrema se dispararon hasta el 33,7 % (209 millones de personas) y el 12,5 % (78 millones), respectivamente, mientras que el PIB per cápita regional terminó en el mismo escalón de 2010, lo que significa que la región se encuentra frenteaunanuevadécadaperdida,comolade1980.
Tras recordar que estas empresas aportan el 61,2 % del PIB y generan el 61,2 % del empleo regional,javierpaulinich,titulardelsistemaeconómico Latinoamericano y del Caribe (Sela), llamó la atención sobre el hecho de que las mipymes requieren un abordaje “integral”, lo que implica tratar “de manera simultánea, y no por etapas, los problemas estructurales que las aquejan, como la informalidad, el escaso financiamiento y la falta de digitalización”. A pesar del crecimiento sostenido del sector de microfinanzas en Latinoamérica, el nivel de penetración es muy desigual. Países como Nicaragua, Bolivia y El Salvador presentan niveles estimados de penetración mayores al 30%, mientras que Venezuela, Argentina y Brasil tienen niveles inferiores al 5 %, según datos del BID. La informalidad tampoco ayuda, de ahí que muchos Gobiernos hayan puesto en marcha en los últimos meses incentivos que permitieran incorporar al sistema formal la mayor cantidad de empresas. También existen “fallas en el mercado” relacionadas con la metodología de análisis de riesgo de las entidades bancarias y los costos de transacción, dado que los montos de los créditos que piden las mipymes suelen ser bajos, “generando altos costos de transacción en los procesos de evaluación y traspaso de fondos”, afirmó la responsable de la Cepal, Alicia Bárcena. EFE
“la pandemia ya deja 37,3 millones de infectados En latinoamérica y mantiene aún a muchas Economías funcionando a medio gas”