Nuevas inversiones
No todas las noticias que nos llegan son negativas. Este año es portador de excelentes nuevas inversiones en el rubro textil, provenientes de China y Estados Unidos, de acuerdo con información brindada por el presidente de la Asociación Hondureña de Maquiladores, Mario Canahuati. La Tex Hong planifica invertir más de 400 millones de dólares. De hecho, ha adquirido terrenos en Choloma para la construcción de sus instalaciones físicas, en tanto la Parkdale Mills invertirá 150 millones de dólares, también en Choloma. La GK Global con 240 millones de dólares y la San Mar con más de $100 millones.
La ley de la compensación se da tanto en el campo económico como social. Si el pasado año fue de contracción en el monto de la inversión local y foránea, con pérdida de alrededor de 35,000 puestos de trabajo, generando desempleo masivo, impactando en la actividad comercial y en la migración de mano de obra calificada hacia el exterior, este 2024 promete ser, si se logra consolidar un clima de seguridad jurídica, mejoras significativas en el suministro de energía y en la infraestructura física, incrementos realistas en el monto del salario mínimo y una equilibrada legislación de reforma tributaria, el de la anhelada reactivación. La importancia de la industria maquiladora en la economía hondureña, a partir de 1990 en adelante, es altamente significativa: nuestro país continúa siendo en la región centroamericana el más grande exportador de ropa hacia los Estados Unidos, el segundo lugar en la cuenca del Caribe, el quinto a nivel mundial.
Comunidades costeñas como San Pedro Sula, La Lima, Villanueva, Búfalo y Choloma han presenciado un auge económico debido a la presencia de maquilas que generan efecto multiplicador incluyendo la construcción de viviendas sociales para albergar a la mano de obra laborante en ellas. Los iniciales conflictos laborales, provocados en parte por el choque de culturas han sido superados, privando hoy un clima de recíproca armonía y entendimiento entre el trabajo y el capital.
El continuo respaldo de nuestros gobiernos, municipales y centrales, es decisivo para la estabilidad y expansión del sector maquilador, cuyas ventas dependen de la demanda en los mercados compradores de sus productos. No olvidemos que el sector maquilador es uno de los principales sectores de la empresa privada que genera miles de puestos de trabajo, pero no únicamente para nuestras compatriotas. En la coyuntura actual, en la que el desempleo abierto y disfrazado se ha incrementado dramáticamente y con ello ha aumentado el éxodo poblacional, la creación de nuevas fuentes de trabajo debe merecer especial prioridad y atención por parte del gobierno, otorgando los estímulos pertinentes.