El Ciclón arrecia y borra el invicto verde en la capital
Yeison Mejía y Walter Martínez firmaron el triunfo del equipo de Diego
TEGUCIGALPA. El Monstruo llegaba a la capital envuelto en una versión muy dulce, pero el Azul se encargó de recordarle al Verde el dolor de muelas que suelen representar sus visitas a la capital. Allí se diluyó por enésima vez y allí vio enterrado su invicto: 20.
Las águilas mostraron su mejor plumaje para pasar por encima a un Marathón que arribó presumiendo su buen presente y se salió con tantas dudas como las veces en que el Motagua merodeó el marco de César Samudio. Y eso que el Pistolero no anduvo afinado. Antes de media hora perdonó en dos ocasiones ante un cancerbero que apagó el cabezazo de Camellito y el zurdazo de Zapatilla.
Con Walter como brújula y haciendo sufrir al Chelito, el Mimado encontraría al 33 premio a su superioridad. Yeison Mejía retrató a Alexy Vega, con túnel incluido, y venció la resistencia del portero con un latigazo cruzado que significó el 1-0.
Colocho con la sentencia. El juego y el marcador se encargaban de rememorar que Marathón ante Motagua en el Nacional sumaba 14 partidos sin ganar y siete derrotas al hilo. Estadísticas demasiado pesadas para un Verde que lucía muy distante de ese equipo que había marcado 14 dianas en cuatro juegos. Vega, Damin, Clayvin y el Chino (ante su ex) carecían de protagonismo en ofensiva frente a un Ciclón que pegaría el segundo azotazo. Si Samudio le sacó un gol cantado a la cabeza de Carlos Meléndez, el canalero nada pudo hacer ante la combinación de Auzmendi con Colocho, quien hizo explotar las gargantas (2-0, al 62). Las sonrisas motagüenses se apoderaban del Chelato Uclés. Se abrazaba el debutante Rodrigo Auzmendi con su hemano al reemplazarlo y se abrazaba todo el pueblo azul.
Hasta la Barbie se daba tiempo de bajar de pecho el balón en el costado del campo. Motagua relanza su candidatura de gran favorito para pelear por las vueltas y el título.