Yummus: emprendimiento social de impacto
La empresa que usa el garbanzo como materia prima en sus productos busca apoyar a agricultores de Guatemala para que se reduzca la migración hacia EE. UU.
La pandemia por Covid-19 fue el propulsor, de acuerdo con los expertos, del comercio electrónico, ya que aceleró la adopción de compras en línea, pagos sin contacto y la búsqueda de productos por medio de redes sociales. Los emprendimientos sociales o con propósito están en auge en Centroamérica. Estos son aquellos proyectos liderados por hombres y mujeres comprometidos con resolver problemas de una sociedad.
Estos emprendedores son aquellos que “se enamoran de un problema y lo resuelven cómo sea”, de acuerdo con la descripción que brinda para este perfil Sara Lee Wolfe, líder de emprendimientos para América Latina de Bridge for Billions.
Un ejemplo de estos emprendimientos con propósito nació en 2015, en Guatemala, cuando dos amigos decidieron iniciar un negocio, pero con la meta clara de “emprender con un propósito”.
“Desde antes de vender una sola unidad, nos propusimos que no queríamos emprender sin un propósito, sin hacer el bien, sin proponer algo bueno”, es la frase con la sentencia el nacimiento de Yummus Foods, Rodrigo López, uno de sus fundadores.
Esta marca apuesta por el garbanzo como materia prima. Dentro de su gama de productos se encuentra y destaca el hummus (pasta de garbanzos hecha con zumo de limón, semillas de sésamo y aceite de oliva, generalmente), un plato tradicional típico de Oriente Medio.
Aunque también presentan otros como chirmol, aderezos para ensaladas, dip y tahini.
Pero, ¿cómo el garbanzo puede contribuir al desarrollo de Guatemala? De acuerdo con Rodrigo, este grano, además de ser resiliente al cambio climático, es un excelente compañero en la nutrición, da más proteínas y potasio que cualquier otro grano a quien lo consume.
Viendo estas oportunidades, Rodrigo, junto con Simán Layyous, empezaron a establecer causas sociales para apoyar.
La primera fue liderar el programa Buy One, Help One (Compra uno, ayudas a uno), donde con cada unidad de producto que venden dan cierto apoyo para erradicar la desnutrición crónica infantil, uno de los problemas sociales que más afectan a la población en Guatemala.
Otras causas que apoyan son acciones enfocadas en reforestar los bosques del país y llevar agua potable a más comunidades.
UNA OPORTUNIDAD PARA NO MIGRAR
Uno de los programas que tomó impulso en medio de la pandemia por COVID -19 y de la incertidumbre fue el de sembrar garbanzo en Guatemala, aprovechando el talento agrícola que hay en el país.
Con esta iniciativa buscan que estas personas no lleguen a migrar, como suele suceder, para solventar sus problemas económicos, sino que se queden en el país y vean todo el potencial que tiene el garbanzo para sus finanzas y su crecimiento como trabajadores de la tierra.
De acuerdo con cifras del Instituto Guatemalteco de migración, cada año más de 300.000 guatemaltecos buscan emigrar ilegalmente a Estados Unidos en busca de mejores condiciones de vida, alejados de la pobreza y la violencia en el país centroamericano.
Desde 2017, estos dos jóvenes vieron que en el país es factible sembrar garbanzo – grano que no necesita mucha agua y se da en zonas áridas - y fue así como desde el año pasado iniciaron con las pruebas piloto.
De acuerdo con los estudios realizados desde Yummus, la siembra del garbanzo puede dejarles hasta tres veces más ingreso que la siembra del maíz a los agricultores, por mencionar un ejemplo. “Entonces, estamos haciendo todo lo posible para que esto se de con los resultados esperados”.
Al inicio de Yummus el garbanzo tuvo que ser importado y aún sigue siéndolo, ya que en Guatemala “no hay garbanzo limpio, sin contaminación, buscamos en los mercados y no encontramos buen garbanzo… Cabe destacar que Guatemala no es un país productor de garbanzo”, agrega Rodrigo, quien ahora lidera este proyecto.
En junio de 2021, más de 60 agricultores, que participan en esta etapa de pruebas, ya vieron cosechados sus primeros resultados.
“Ya les compramos la primera cosecha. Hace una semana recibimos el garbanzo y ahora, como Yummus, estamos en las pruebas de calidad con nuestros procesos y productos”, indica Rodrigo.
“Tanto los agricultores como nosotros estamos contentos porque sabemos que estamos más cerca de tener un impacto más robusto y sustancial en el país y la región”.
Ahora que ya cuentan con un listado de aprendizajes y tienen un grupo comprometido con dar prosperidad al país, los dos jóvenes siguen en la búsqueda de personas que se sumen a esta iniciativa, ya sea para ayudar en el financiamiento para la compra de los paquetes agrícolas y tecnología de riego, como aquellos
YUMMUS busca incrementar la producción. la próxima Siembra Será a finales de 2021 Y Se cosechará en 2022