IVA EN COSTA RICA.
El país se prepara para aplicar un IVA general del 13%.
Costa Rica se unió tardíamente a la tendencia mundial por la implementación del Impuesto al Valor Agregado (IVA) –cuya aprobación aún está pendiente por parte de la Asamblea Legislativa– y desde ya el sector empresarial analiza todos los escenarios a los cuales se debe enfrentar y los posibles impactos que tendrá en las actividades productivas.
El IVA representa la apuesta preferida del Gobierno por mejor la gestión de recaudación frente a un entorno de un 6,2% de déficit fiscal que crece constantemente empujado además por el creciente pago de intereses de deuda externa e interna del país.
Además, se tiene una inflación proyectada para el 2018 de un 3%, con un crecimiento real del Producto Interno Bruto del 3,6%, las remuneraciones y el pago de servicio de deuda significan el 90% del presupuesto nacional. Así las cosas, el panorama no es para nada alentador.
Como bien lo dice Sergio García, Socio de KMPG Costa Rica, el país está viviendo de ‘pasar la tarjeta’ y ya no queda mucho margen de maniobra.
Aunque es un impuesto al consumo de Bienes y Servicios y afecta principalmente al consumidor final, está pensado para una redistribución de ingresos desde los sectores de mayores ingresos hacia los de menores ingresos. Costa Rica pretende aplicar un IVA general del 13%. El mismo porcentaje que El Salvador. En Nicaragua y Honduras es del 15% y en Guatemala del 12%. El IVA más bajo de Latinoamérica lo tiene Panamá con un 7%.
James Freed – Principal, SALT - International Indirect Tax KPMG LLP – y Carlos Contasti – Manager, SALT - International Indirect Tax KPMG LLP – llevan varios años acompañando a clientes en diferentes partes del mundo a prepararse para la introducción del esquema IVA y participaron recientemente en Costa Rica en un seminario sobre el tema. Consideran que, desde la perspectiva empresarial, este impuesto debería ser neutro para los negocios siempre y cuando se logre hacer correctamente, es decir que no termine por financiar con fondos propios el crédito fiscal correspondiente al porcentaje del IVA.
Prepararse con la debida antelación
Se trata de un impuesto importante por su elevado valor fiscal asociado. Freed recordó que el hecho de que diferentes partes del negocio participen del
costa rica pretende aplicar un iva del 13%, el mismo que el salvador.
con el 7%, tiene el iva
latina
esquema del IVA, la compañía está llamada a acatar la normativa al pie de la letra, presentando las declaraciones a tiempo, pagando lo que debe, teniendo toda la documentación lista, tomando los datos de las fuentes correctas y haciendo las verificaciones puntuales, saber cuáles partes del negocio deben analizarse, porque lo que se busca es que todo este proceso le permita tomar el máximo crédito (devolución) del impuesto posible.
El IVA es la panacea de los gobiernos para poder recaudar más, explicó Carlos Contasti, y su buena recaudación requiere de un adecuado cumplimiento: “Es fácil para las administraciones tener control, saber los costos en toda la cadena de consumo y hacer una recaudación eficiente. El efecto IVA permite una recaudación en cascada pues la Administración recoge una parte del impuesto de cada una de las partes de esa cadena”.
Se le denomina en ‘cascada’ porque cada ciclo productivo se lo traslada al siguiente, hasta llegar al consumidor final, quien es el último bastión de la cadena del IVA; por tal argumento es que el impuesto debería ser neutro para el resto de los participantes del ciclo siempre y cuando se mantengan los controles adecuados.
Para el Estado, es un gravamen más efectivo porque con el impuesto sobre las ventas, si la empresa no reporta, la
autoridad tributaria no puede recoger nada, mientras que con el IVA siempre recaudará porciones del impuesto a lo largo de la cadena.
El mayor impacto del IVA, de acuerdo con los expertos de KPMG, recaerá en aquellas empresas con transacciones exentas en la actualidad y que podrían tener problemas a la hora de calcular el nuevo gravamen; igualmente podría ser complicado para empresas con tarifas combinadas con los bienes que compran; o para aquellas con descuidos importantes en su flujo de caja.
Mucho cuidado deberán tener aquellas empresas que aplican la regla prorrata (cuando la misma empresa o profesional realiza operaciones que generan el derecho a deducir cuotas soportadas junto con otras que no generan tal derecho) y no pueden tomar el IVA completo; o bien aquellos bienes y servicios gravados no solo con el 13% de ventas sino con otras tarifas diferenciadas; igualmente las empresas que exportan podrían tener problemas a la hora de recuperar ese crédito fiscal (pues el IVA lo pagará el país comprador o el beneficiario del servicio) pero el exportador deberá pagar todos los IVA que utilizó para fabricar el producto. Si bien la ley le otorga derecho de recuperar ese crédito, el proceso se vuelve complejo.
“El IVA afecta a muchos departamentos: cadena de suministros, compras, ventas… todos deberían involucrarse; lo que se adquiere y lo que se vende, lo que se financia y lo que se recupera. Dónde se podrá recuperar aborda análisis de precios con proveedores por si el IVA afectará precios se requiere renegociar precios con proveedores”, detalló Freed.
Poner atención a las facturas, que cumplan con los requisitos solicitados por la Administración Tributaria; de lo contrario la empresa no recuperará ese crédito y el impacto será mayor. El hecho de comprar bienes y servicios a proveedores o entidades no registradas derivará en consecuencias.
Adicionalmente, supone una fluida comunicación con la Administración para comprender bien los reglamentos nuevos; desarrollar procesos de capacitación en todos los procesos del negocios, revisar cadena de suministros, de compras, ventas y mapear todos aquellos grupos con los cuales se deberá dialogar una vez implementado el IVA.
Cada empresa, industria o fábrica se verá afectada de manera diferente por el IVA, de todas maneras tendrá una base más amplia que el de ventas. Los expertos tributarios admiten que el gravamen supone tomar decisiones a lo interno de la compañía relativas a dejar el precio del producto o servicio igual o aumentarlo; de sacar el IVA a lo que ya le cobra al cliente; todo en aras de que el cliente tenga una buena experiencia de compra.
Es importante atender gastos y cómo recuperarlos por ejemplo, en aquellos gastos relacionados con viajes de sus empleados, las facturas deberán venir a nombre de la empresa, ya no de la persona y deben contener los datos correctos.
Los contratos con terceros deberían incluir cláusulas sobre el IVA para no dejarlo a la libre interpretación y más bien contemplar lenguajes de protección hacia clientes o proveedores.
Actualizar los sistemas tecnológicos-informáticos en las empresas resulta vital para poder calcular el IVA de manera adecuada sobre cada suministro; generar las facturas según normativa vigente y producir los reportes necesarios para la presentación de declaraciones exactas. Los software deberán ser capaces de mapear transacciones del IVA a lo largo del proceso y en cada etapa hacer los cálculos de cuánto se debe pagar, quiénes son los responsables, cuál es la tarifa que aplica y cuánto es recuperable.
Freed y Contasti esperan que en Costa Rica -como ha sucedido en otros países– el período de acomodo entre la aprobación del impuesto y la plena aplicación transcurra en un plazo de entre seis y nueve meses; en tanto, la idea es que la autoridad tenga discreción a la hora de imponer multas o penalizaciones